Cargado de sueños

Nacho Sáez
-

Javi Guerra cuenta a El Día de Segovia lo que se lleva en la maleta a grandes citas como la que disputa el domingo en Berlín.

No tiene amuletos y tampoco repite rituales por superstición de una gran cita a otra. Al igual que en su forma de ser, Javi Guerra exhibe sencillez a la hora de preparar el viaje que realizó el lunes a Berlín, donde le aguardan los Campeonatos Europeos de Atletismo. Acepta la propuesta que le realiza El Día de Segovia y muestra lo que se llevará en la maleta; esa que la federación entrega a todos los integrantes de la selección española que acudirán a la competición y que realmente va más cargada de sueños e ilusiones por cumplir que de otra cosa.

Después de haber viajado por medio mundo durante los últimos años, el atleta segoviano tiene claras las cosas que no pueden faltar y esta semana ya las tenía preparadas para que cuando llegara el lunes por la tarde al Aeropuerto Adolfo Suárez no echara nada de menos. En primer lugar aclara que el objetivo en Berlín «es competir y no ir a hacer turismo, por lo que apenas me llevo nada que no tenga que ver con los entrenamientos y la carrera». 

Además de la maleta, la federación le proporciona toda la ropa que lucirá la próxima semana en Berlín. Su patrocinador es Adidas, pero en este caso le tocará vestir Joma en cumplimiento de las normas de régimen interno que los atletas aceptan cumplir en cada gran campeonato. «Las zapatillas y los calcetines sí que nos permiten utilizar los de nuestra marca, porque eso ya es algo más personal», explica. Las zapatillas de Guerra son unas Adidas Adizero Adiós, aunque no el modelo más reciente. «Es el de hace dos años, pero me he adaptado muy bien a ellas. Antes de probar otras prefiero quedarme con estas, que sé que me van a dar muy buen resultado», apunta. Tienen, además, un significado especial ya que con ellas corrió y ganó el pasado mes de febrero el campeonato de España de maratón en Sevilla, en el que  también pulverizó su marca personal en la distancia.

Lo hizo impulsado por esas zapatillas que jubilará después de la cita de Berlín y con sus pies protegidos por unos calcetines especiales. No es este un elemento menor en la equipación de un atleta, tal y como subraya el  segoviano: «No deben ser negros, para que no absorban tanto el calor, y también hay que tener cuidado con que no te hagan rozaduras». La equipación que llevará durante la carrera se completa con la camiseta y el pantalón con los colores de España y con otros dos artículos. Uno son las gafas deportivas, también de Adidas, y el otro se refiere a una tirita para la nariz que reconoce que ya se ha convertido en una manía llevarla. «En teoría te abre las fosas nasales, pero no sé. Yo ya la uso por si acaso. La usan también las personas que tienen problemas de ronquidos», cuenta mientras sigue repasando lo que se llevará.

No los tendrá consigo durante la carrera, pero los entrenadores de la selección estarán esperando en cada uno de los avituallamientos para entregárselos. Son los botes con los que se hidratará durante estos 42 interminables kilómetros. Tomar sales y geles resulta imprescindible. No así el reloj que también mete en la maleta ya que no lo utilizará durante la prueba a pesar de que es uno de estos modernos que mide los pasos, las calorías, las pulsaciones... Él prefiere seguir sus sensaciones y sólo controlar estos parámetros durante los entrenamientos.

Todavía hará algún rodaje y activación en Berlín antes de la cita del domingo y por ello en el equipaje de viaje ha incluido otros cuatro pares de zapatillas diferentes, entre ellas unas de paseo por si tienen tiempo de realizar una breve visita a la ciudad, aunque está difícil. El atleta segoviano ha estado en Río de Janeiro, Pekín o Tokio, pero apenas conoce de ellas nada más que sus hoteles. «No puedes estar dando vueltas y haciendo turismo porque necesitas descansar», señala. El tiempo entre entrenamiento y entrenamiento pasa para Guerra entre charlas con los compañeros de la selección y series que ve en el iPad mini que le acompaña. «Estoy viendo The Sinner, que la tengo a medias, y ahora Marta[Muñoz, su mujer] me ha descargado toda la de Peaky Blinders. No la he empezado para guardar las tres o cuatro temporadas que tiene para Berlín. También leo algún trabajo que he hecho a nivel mental con Pedro [Luis Gómez, su amigo y preparador en el aspecto psicológico]», desvela. Todo está enfocado a llegar de la mejor manera posible al Día D. «Estoy muy contento con cómo ha ido la preparación. El sueño es una medalla, pero voy con aspiraciones de todo», avisa.