«Aquí no se puede desenganchar nadie», reclamó Abraham García tras una nueva derrota de la Segoviana, esta vez frente al Fuenlabrada. El técnico madrileño hacía esta petición a los aficionados después de no haber podido brindarles aún una victoria, pero resaltaba que «[los seguidores] son más importantes que yo y se lo vamos a devolver».No había atisbo de rendición en la noche de este domingo en Abraham a pesar de que su equipo es colista y sólo ha sumado de momento un punto de dieciocho posibles. «Esto se saca creyendo en lo que uno hace, con confianza y mirando a los de enfrente, como lo que son, once tíos», añadía en declaraciones a los medios mientras repasaba un partido en el que no encontraba muchos reproches para sus jugadores. «Este deporte, en este nivel, es así. Estábamos bien plantados pero ellos son peligrosos y en una acción, que también es mérito de ellos, nos han cogido. Y a partir de ahí hemos tenido que trabajar más y hemos tenido buenas opciones. A perro flaco todo son pulgas. Es un partido que ya hemos visto, pero hay que seguir intentándolo. En el fútbol prima el que mete la pelotita entre los tres palos, no el que pone más carne en el asador y un poco de desgracia también tenemos», argumentó. E insistió: «Estoy tranquilo porque sé lo que ha hecho el equipo, cómo ha entrenado y cómo ha jugado. Algún jugador ha podido estar ansioso, pero yo ahora es cuando más confío en ellos, creo en ellos a muerte y todo el mundo está en la dinámica». El entrenador de la Segoviana dejó otro mensaje a los aficionados. «Que estén lo más cerca posible. Esto es fútbol y a veces pierdes. La aficion sabe que el equipo ha hecho cosas bien y que el fútbol nos está castigando mucho», reflexionó.