La Guardia Civil de Segovia ha detectado en los últimos días varias denuncias falsas, en las cuales los denunciantes manifestaban ser víctimas de robos pero eran falsos los hechos denunciados. En una de ellas el propietario de un establecimiento hostelero denunció haber sido víctima de un robo en el interior de su local, donde los supuestos autores habían forzado las máquinas de tabaco y tragaperras, manifestando que el valor de lo sustraído, ascendía a más de 4.000 euros. Posteriormente se pudo comprobar que la denuncia interpuesta era falsa, ya que había sido el propio dueño del establecimiento quien había simulado el robo. En otra localidad se produjo un hecho similar. El propietario de un vehículo simuló el robo del mismo, pero posteriormente fue localizado estacionado en la calle sin signos de haber sido sustraído. El denunciante se encontraba en estado ebrio.

Las denuncias falsas obligan a detraer personal para la investigación de hechos que no se han producido, lo cual va en perjuicio de la investigación de las verdaderas infracciones penales sufridas por los ciudadanos. Además, tienen consecuencias penales tal y como viene recogido en el Código Penal en su artículo 456.