Cinco mil ochocientos setenta y cuatro euros. Esto es, grosso modo, lo que le correspondería a cada castellano y leonés si la Junta decidiera repartir los 13.809 millones de euros del presupuesto del próximo año entre todos los habitantes de la Comunidad. Casi 800 euros más que con las cuentas de 2021. Unos 5.874 euros que, no obstante, incluyen todas y cada una de las partidas de gasto que la Administración regional tiene, como salarios, deuda pública, o subvenciones. Aplicando el mismo rasero a todas las regiones que ya han presentado o aprobado sus cuentas –solo Aragón, Murcia y Cataluña no lo han hecho, aunque las dos primeras ya tienen el techo de gasto–, Castilla y León se sitúa como la cuarta del régimen común en presupuesto per cápita para el próximo 2023. Extremadura lidera la tabla con casi 7.400 euros por persona, seguida de Castilla-La Mancha (6.063) y Cantabria (5.995). 

Tres comunidades con problemas y realidades muy similares a las de Castilla y León que evidencian lo costoso de mantener a sociedades poco pobladas y muy envejecidas. Por el contrario, la Comunidad de Madrid apenas reparte 3.800 euros por cabeza. Si limpiamos de 'polvo y paja' los cuentas autonómicas para el próximo año y nos fijamos solo en las inversiones reales que el Gobierno regional tiene previsto acometer durante 2023, el reparto per capita mengua sensiblemente. Concretamente serían 430 euros por persona lo que quedaría de repartir los más de 1.000 millones que el Proyecto de Presupuestos contempla para inversiones en 2023.

Las mayores cuentas de la historia de Castilla y León vienen impulsadas al calor de la lluvia de millones europeos –casi 2.000 para el próximo año– y apuntaladas por los más de 8.100 millones recibidos del modelo de financiación. También es la cifra más alta de la historia para este caballo de batalla por el que la Junta lleva peleando más de una década con el objetivo de que se reforme teniendo en cuenta criterios de población.

De hecho, los dos han seguido una evolución prácticamente idéntica durante los últimos ejercicios. Tal es la similitud que ambos, tanto los presupuestos de Castilla y León como los recursos recibidos por el modelo de financiación autonómica, han crecido al mismo ritmo durante el último lustro. Mientras los PGC se han incrementado un 27% y 2.950 millones de euros desde 2018, las transferencias del modelo lo ha hecho en 1.656 millones y un 25 por ciento más.

Semana intensa

Unas cuentas que hoy meten la directa una vez superada la primera gran prueba de fuego, que fue la presentación de las mismas el pasado 27 de octubre. «Nosotros ya hemos cumplido con nuestro trabajo, ahora le toca a las Cortes marcar los tiempos para su tramitación parlamentaria», reconocía entonces el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. Guante que recogió el Parlamento regional, que esta semana anunció el calendario que seguirá el PGC 2023 hasta que el rodillo de la mayoría absoluta de PP y Vox sirva para aprobarlos el 23 de diciembre. Si todo sigue el guión previsto, Castilla y León volvería a empezar un año con las cuentas en vigor por primera vez desde el 2018.

Antes de que todo eso ocurra, los diez consejeros tendrán que explicar desde hoy en sus respectivas comisiones parlamentarias los pormenores de cada departamento ante los grupos. 

Turno que arrancará, como es tradicional, con la intervención del consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, para explicar no solo los presupuestos de su consejería, sino también el conjunto global del proyecto de cuentas para la Comunidad.

Tras él, desfilarán por las Cortes el consejero de la Presidencia, Jesús Julio Carnero, también el lunes; el de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, y el de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, lo harán el martes; el miércoles será para la titular de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral, y la de Educación, Rocío Lucas; el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, iniciará la explicación del proyecto de cuentas de su Consejería el jueves, al igual que su homóloga de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco. Cerrarán la intensa semana de comparecencias el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas,  y el titular de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja.

El vicepresidente Juan García-Gallardo no tiene ningún lugar asignado para intervenir ante los grupos esta semana, según el calendario remitido por la institución. Una semana que será la antesala de 45 días de intenso trabajo parlamentario antes de PP y Vox saquen adelante su primer presupuesto juntos.

Cuatro comunidades han incrementado sus PGC más que Castilla y León 

El presupuesto de Castilla y León para 2023 será el quinto de España dentro del régimen común que más crezca el próximo ejercicio, con un repunte del 12,35 por ciento sobre 2021 –último PGC aprobado por el Gobierno autonómico–. A la espera de conocer las cifras finales de Aragón, Cataluña y Murcia, lo cierto es que la Comunidad se sitúa a la cabeza del país en este sentido. Baleares, con un aumento del 21,28 por ciento; Extremadura, con el 21,06 por ciento; Cantabria, que avanza un 13,91 por ciento; y Andalucía, con un 12,9% están por delante de Castilla y León.

Por el momento, solo hay una Comunidad cuyo presupuesto para 2023 arroje una evolución negativa sobre los del año 2021. Se trata de La Rioja, cuyas cuentas por valor de 1.824 millones retroceden un 0,87%, algo que desde el Ejecutivo riojano achacan a la disminución de los vencimientos de préstamos que asumirá el Ejecutivo en 2023. 

Si la comparativa se realiza con el fallido presupuesto de Castilla y León de 2022 –unos 12.835 millones–, la Comunidad desciende un puesto y sería la quinta del régimen común cuyo PGC más crecería, con un 7,4 por ciento, en el caso de que se hubiera aprobado.

El próximo año servirá igualmente para que Castilla y León se consolide como la quinta comunidad de España –la sexta sin incluimos a las del régimen común– con más presupuesto de todo el país. Es el mismo puesto que ocupa en cuanto a población, aunque en cuanto a extensión territorial es la primera de España. Los 45.600 millones de Andalucía volverán a liderar el ranking, seguidos de, previsiblemente, Cataluña con cerca de 40.000; la Comunidad Valenciana, con 28.400; y Madrid, con 25.738 millones.