La subida en el tono protagonizada esta semana por Alfonso Fernández Mañueco y Francisco Igea la han rebajado en Segovia, primero, el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente (PP), al señalar que Ciudadanos continuará en su equipo de Gobierno, y después en esta entrevista la diputada provincial de la formación naranja, Noemí Otero (Segovia, 27 de julio de 1989), al calificar como «respetable» la decisión del presidente de la Junta de cesar a sus compañeros de partido y al definir a De Vicente como «un ejemplo de que los segovianos somos gente de palabra».

¿Ha sido esta semana más estresante que otras tras lo ocurrido en la Junta de Castilla y León?

Este año tenía especiales ganas de que empezasen las vacaciones de Navidad porque es un año especial y distinto para mí, porque por primera vez voy a pasar las Navidades con mi hija, y la verdad es que esto ha cambiado el calendario. Pero para mí y para todos.

¿Y está agobiada?

No, agobiada no. Es una circusntancia que estaba en el tablero, con la que yo a nivel particular no contaba justo en este momento pero entendía que era una posibilidad, que era una amenaza real y que se ha ejecutado. A mí no me parece una decisión responsable, sobre todo en el momento en el que estamos, con 277 casos nuevos de covid hoy solo en Segovia. No me parece responsable pero sí respetable, como todo en política. Ahora van a ser los castellanos y leoneses los que el 13 de febrero, cuando vayan a votar, nos van a decir si era oportuna o no la medida.

¿Le parece una traición?

En tres de las cuatro comunidades autónomas en las que Ciudadanos favoreció que hubiera un presidente del Gobierno regional del Partido Popular, aun teniendo sus peores resultadores en cada una, la realidad es que Ciudadanos ha sido literalmente expulsado. Con una particularidad en nuestro caso y es que Ciudadanos no se ha movido una sola coma de lo que se acordó en junio de 2019. Se ha seguido el acuerdo de gobierno de manera escrupulosa con total responsabilidad y total integridad por parte de todos los miembros del Gobierno. No es una valoración, son los hechos.

¿Ha hablado con Francisco Igea desde el lunes?

No, no he hablado con él.

¿Considera que debe ser el candidato de Ciudadanos a la Junta de Castilla y León el 13-F?

No es una consideración que me corresponda a mí, pero por el momento no hay confirmación de quién va a ser el candidato. Sí que debo decir que Francisco Igea como vicepresidente tiene un bagaje en la gestión que le avala y es evidente que junto con la consejera de Sanidad, Verónica Casado, han sido los dos rostros visibles de Ciudadanos que han bregado durante la pandemia día a día. Han sido dos años y medio de legislatura en los que los últimos veinte meses han estado marcados por una pandemia, algo a lo que en la época moderna nadie había tenido que hacer frente. Dicho esto, no sé quién va a ser el candidato de Ciudadanos.

¿En Segovia será Marta Sanz?

Igualmente lo desconozco. Entiendo que tiene que haber un comité electoral de todo el proceso y que será a través de ese órgano donde se tome una decisión.

¿A usted le gustaría que fuera Marta Sanz?

Ya no es una cuestión de que me guste o no a mí personalmente, sino de que pueda representar a este proyecto con capacidad y con cierta solvencia. Sí que he podido vislumbrar en estos años en esta provincia que somos un equipo muy compacto y que todos nos ayudamos. Hay una sinergia y una sintonía muy correcta y todos trabajos a una tanto en el ámbito local como autonómico. Como ejemplo está la figura del alcalde de Lastras de Cuéllar, Andrés García, que aceptó acompañarnos bajo las siglas de Ciudadanos con el único propósito de mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos. Como lo hacen todos los cargos públicos pero de una manera especial porque carecen de agua potable. Va a ser una realidad al final de su mandato que se resuelva el problema de la calidad del agua de Lastras de Cuéllar por su esfuerzo y tenacidad pero también por la colaboración entre instituciones.

¿Las elecciones en la Junta de Castilla y León van a ser en clave nacional para Ciudadanos?

Yo creo que las ha llevado a la esfera nacional el señor Casado. Creo que lo que están haciendo es un 'Juego de Tronos' dentro del PP y no saben cómo ensombrecer la victoria que han tenido en la Comunidad de Madrid en lugar de sacar pecho de lo que ha conseguido su representante allí. Para nosotros no son unas elecciones en clave nacional. Son otros los partidos que están utilizando Castilla y León como tablero de ajedrez y es mucho más que eso y merece mucho que eso. Castilla y León estaba evidenciando una modernidad en la rendición de cuentas y la transparencia, y yo creo que hay que seguir apostando por eso. La moderación, la cordura y la sensatez ocupan un espacio muy amplio que no se puede quedar huérfano. Sobre todo es un momento trascendental para dar la batalla a la izquierda desde la razón. Hay que demostrar que no solo la izquierda puede ser la adalid de distintas banderas, sobre todo en el aspecto cultural e ideológico.

¿Pero para Ciudadanos el 13-F es una final, la última oportunidad?

Yo creo que no, yo creo que todavía hay mucho partido por jugar. El ejemplo somos los concejales que estamos en el ámbito municipal. A nosotros nos eligieron los ciudadanos en 2019, nuestro compromiso era para cuatro años y nos quedan 17 meses de gestión y de trabajo. Tenemos que seguir en esa línea y, por tanto, esto no es un fin de Ciudadanos. Vamos a continuar hasta 2023 pase lo que pase en estas elecciones.

¿Se ha planteado marcharse al PP como han hecho otros cargos de Ciudadanos?

Hablo en primera persona pero traslado el mensaje de mis compañeros concejales de Ciudadanos en la provincia. Cuando nos presentamos a las elecciones en 2019 fue con el objetivo claro de hacer algo bueno para mejorar la vida de las personas, pero estoy muy tranquila porque tenemos intención de volver a nuestras vidas profesionales. Los cuatro consejeros de Ciudadanos venían de una profesión, han pasado por la política y vuelven a su profesión. No ha visto una noticia así antes. Es lo bueno de Ciudadanos, que no hay políticos profesionales. Pero el compromiso con los ciudadanos lo adquirimos en 2019, dura hasta 2023 y en ese momento cada uno va a ser libre de tomar el camino que considere. Hay concejales que tienen claro que volverán a sus vidas profesionales previas, otros que aún no saben si continuarán, pero todos tenemos un oficio detrás de esto. ¿Si vamos a ir a otros sitios? No tengo la respuesta en estos momentos.

¿Dónde se ve usted?

En mi caso concreto me veo súper satisfecha de que puedo hacer una doble labor. Creo que soy una 'rara avis' porque estoy demostrando que tengo capacidad de gestionar un área en la Diputación Provincial añadiendo nuestro toque a lo que ya se venía trabajando desde antes, y por otro lado en el Ayuntamiento de Segovia estamos desempeñando un buen papel desde la la oposición. Una oposición responsable y útil para sacar a la luz los desmanes de Luquero en el Ayuntamiento de Segovia. Ya está bien de casi veinte años de lo mismo. Cuando llegue 2023 tomaré una decisión, pero ahora digo de corazón que no me mueve otro objetivo que no sea seguir sacando adelante proyectos buenos para Segovia y seguir sacando a la luz las vergüenzas de la alcaldesa de Segovia.

¿Lo que ha ocurrido en la Junta puede afectar al acuerdo que tienen en la Diputación?

Yo creo que no. En la Diputación estamos trabajando como un equipo de Gobierno, que es lo que somos, y estamos haciendo un gran trabajo creo. Los segovianos están por encima de los partidos y las personas están por encima de los partidos. Debo decir que ha habido colaboración y sintonía con todos los compañeros del equipo de Gobierno de la Diputación, y por mi parte solo queda agradecerlo y confiar en que así vamos a continuar durante el resto del mandato corporativo. Estoy convencida de que nuestro acuerdo va mucho más allá de los partidos y de las siglas políticas. Va de la palabra de las personas y los segovianos somos gente de palabra.

¿Pero pone la mano en el fuego por que vaya a terminar el mandato dentro del equipo de Gobierno de la Diputación?

La mano en el fuego no la pongo por nada, pero creo que he sido clara. Los segovianos somos gente de palabra y en este equipo de Gobierno hemos continuado unidos tanto cuando ha habido buenas noticias como cuando las ha habido malas en otras esferas. Y el ámbito municipal no es igual. Nosotros estamos pensando en los alcaldes y los vecinos de los pueblos, que es a los que tenemos que servir. Estoy convencida de que el encargo que me hizo el presidente de la Diputación sigue vigente y lo va a estar hasta el final del mandato.

Pero al final su inclusión fue una contraprestación por el apoyo de Ciudadanos al PP para gobernar en la Junta de Castilla y León.

Es una decisión del presidente de la Diputación. La única persona que tiene la potestad de cesar y nombrar a los integrantes del equipo de Gobierno es el presidente de la Diputación. Fue él quien me confió un área delegada, el de Empleo, Promoción Provincial y Sostenibilidad, y nuestra sintonía es completa.

¿Tampoco corren peligro los pactos existentes en ayuntamientos entre PP y Ciudadanos?

Todo sigue igual. Los alcaldes y concejales van a seguir trabajando como hasta ahora porque están pensando en sus pueblos y en sus vecinos, que es en lo que nos tenemos que centrar.

Francisco Igea ha dicho tras su salida que Alfonso Fernández Mañueco no es un hombre de bien. ¿Lo es Miguel Ángel de Vicente?

Miguel Ángel de Vicente, hasta el momento, a mí me está demostrando que en lo que está pensando y en lo que está es en procurar el bienestar de los segovianos. Ahí es donde se encuentran nuestros caminos. Es uno de los ejemplos claros de que los segovianos somos gente de palabra y de que estamos por encima de los partidos políticos, como se está materializando en los proyectos y con la presencia de la Diputación en el territorio. La gente está sintiendo que estamos a su lado en unos momentos muy difíciles.