Declarada como una asociación sin ánimo de lucro establecida como operador de telecomunicaciones para dar servicio de conexión mediante fibra óptica al nordeste de Segovia, Nordesnet tiene en sus estatutos como finalidad la de generar condiciones de vida que sean atractivas para el asentamiento de familias que quieran desarrollar su proyecto de vida en los pueblos. Con esta premisa ya han realizado instalación de red en Castroserracín, Navares de las Cuevas y Cerezo de Abajo y, en la actualidad, llevan a cabo un despliegue para conectar Cedillo de la Torre, Bercimuel y Grajera, a los que ya se les ha dado servicio con una conexión provisional por radio. Más adelante puede que continúen con alguna pedanía de Castillejo de Mesleón y Fresno de Cantespino.  

Según Emilio Utrilla, portavoz de esta compañía, que está dada de alta en la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia y no cuenta con subvenciones de la UniónEuropea (UE) como las grandes, la intención no es «hacerse millonarios, sino ser sostenibles, alcanzar un punto en el que podamos tener empleados que puedan vivir dignamente de su trabajo, pero los beneficios, si los da, los iremos destinando a desplegar en más pueblos o en formación» 

Antes de ponerse en marcha, el análisis que realizaron en la empresa fue que, «igual que en el siglo XIX los asentamientos que no tenían agua corriente empezaron a perder población, en el siglo XX, aquellos a los que les faltaba luz eléctrica fueron abandonados, y en el siglo XXI, a los pueblos que carecen de conectividad les ocurrirá lo mismo», reflexiona Utrilla.

Todo el trabajo que realizan no sería posible sin la ayuda de Red Eléctrica de España ya que emplean la 'fibra oscura' que transporta por sus torres de alta tensión que llevan 400.000 voltios de corriente eléctrica, mientras que ellos se conectan al núcleo del cable neutro del que utilizan dos fibras. Éstas les llevan a un centro neutral donde hacen el intercambio de datos con el mundo entero. También cuentan con la colaboración de  la Fundación Diginet.     

Utrilla reconoce que existe muchos municipios que les piden el servicio pero la previsión es lenta al no poder acceder a los fondos europeos porque son demasiado pequeños para entrar en las convocatorias. De ahí que subraye que,  además de llevar poco tiempo, los proyectos se llevan a cabo «con músculo propio».  

La empresa sostiene que está  muy lejos y va tardar en llegar a otros puntos de la provincia, donde el 50 por cieto de la población carece de acceso a banda ancha, pero si hay demanda agregada reconocen que les puede resultar más fácil abrir una nueva brecha después de 'coser' el nordeste de Segovia.

Un gigabyte de subida y otro de bajada

El portavoz de Nordesnet, EmilioUtrilla, habla en términos tecnicos de aprovechar la 'fibra oscura' de las torres de alta tensión, centros de procesamiento y transmisión de datos  a una troncal que se va desmembrando en ramas para llegar a los pueblos y de ahí a los domicilios. Por ejemplo, la central de Navares de las Cuevas está ubicada en el antiguo Palacio del Marqués de Revilla, del siglo XVII.   

Con términos más compresibles para el público hay que señalar que lo que recibe el usuario es un gigabyte de subida y otro de bajada y, según la experiencia en donde está ya instalada la red, «el rendimiento no puede ser mejor, es una conexión estable, de muy alta velocidad y capacidad porque lo que pretendemos es que el emprendedor digital se pueda fijar en estos pueblos para poblarlos», asegura Emilio Utrilla.

Este  informático que vive en Navares de las Cuevas y asegura que no podía mantenerse sin hacer nada ante la falta de desarrollo tecnológico  en el municipio, considera los precios como «muy atractivos». Por una conexión para fines de semana y vacaciones, 90 días de uso al año, se paga 14,95 euros al mes. Para los 365 días del año, la tarifa mensual es de 39,95 euros. En ambos casos con IVA incluido. 

Para el portavoz de la empresa, Segovia está muy mal de conectividad en el medio rural, es verdad que los fondos europeos hacen que se despliegue en algunos pueblos, pero es un arma de doble filo, porque la media de gasto en consumo en telecomunicaciones en España es de cien euros por hogar al mes.  Su teoría es que, suponiendo que que hubiera mil hogares  estuvieron conectados en el nordeste, se exportarían 1,2 millones de euros a la ciudad, no se quedaría nada en la zona, al contrario de si opera una empresa local, donde se crearían nuevas oportunidades de negocio, creando lo que se denomina como economía circular.  

El problema para aquellos municipios que carecen de conexión por fibra, a juicio de Utrilla «es que el desarrollo se deja a merced de la estrategia comercial de un operador –el 90% de Telefónica–,  desde que se empezó a hacer despliegue de fibra óptica en 2009 (...) todos estos años Castilla yLeón, y Segovia, ha estado a merced de la estrategia comercial de esta compañía», reflexiona Utrilla.

Si esta empresa hubiera podido entrar en las convocatorias de ayudas europeas, según uno de sus promotores, «estaríamos desplegando por toda la provincia pero, como no podemos, estamos apoyándonos entre los vecinos y algún ayuntamiento que nos facilita respaldo». 

También lamenta que se ponen trabas a un emprendimiento con poca gente, modesto, que surge en el territorio y a se le abre la puerta a quien viene de fuera. De momento no cejan en su empeño de «hacer comarca» en esta 'estepa segoviana', conseguir que los servicios que se demandan de grandes empresas dependan de la población  y que los ingresos reviertan en la zona.

En el 'Día de Internet', el año pasado, esta empresa se propuso que «el foco se ponga en las áreas rurales donde la pandemia de la covid-19 ha puesto aún más de manifiesto la brecha digital existente y la inequidad entre quienes tienen acceso a la red y quienes no».