Los vecinos de la localidad de Villacorta han hecho un parón en sus fiestas, celebradas el pasado fin de semana, para realizar y repartir bocadillos y bebidas a los efectivos que trabajaban en el incendio iniciado el sábado en Becerril -ambas pedanías de Riaza-. Este fue declarado de nivel 1 de gravedad por la posible afección a más de treinta hectáreas de masa arbolada y fue estabilizado el domingo.