La secretaria provincial del Sindicato de Enfermería Satse, Miriam RubioMoral (Madrid, 1981), asegura en esta entrevista que «no se puede dejar  en manos de la población y de la responsabilidad individual el control de una pandemia, principalmente porque la imprudencia de unos pocos la pagan muchos». Con la bolsa de empleo agotada, muestra su confianza en que «para el próximo curso [2021-2022] se implante el Grado de Enfermería en el Campus 'María Zambrano' y se inicien estos estudios en la provincia. 

Segovia es una de las provincias que se encuentra en peor situación, ¿cómo afronta la enfermería esta tercera ola?

Segovia es, una vez más, una de las provincias que peor panorama tiene. Esto se está notando porque la incidencia de Covid-19 y el aumento de casos ya están afectando a la prestación de la asistencia sanitaria, en el anormal funcionamiento tanto del Hospital como de la Atención Primaria, sin olvidaros de la repercusión para la enfermería de los diferentes ámbitos, los centros sociosanitarios y emergencias. 

Una vez más, se están teniendo que tomar decisiones para reorganizar las diferentes unidades, servicios y cirugías programadas y con ello el personal que presta servicios en ellas.  Las compañeras y compañeros ven con mucho miedo y preocupación la situación actual que estamos viviendo,  pues sólo el hecho de recordar la tremenda situación padecida durante la primera ola y una remota posibilidad de revivir algo similar les produce, como es lógico, expresiones como: «Otra vez no…, no lo aguantaría» o «esto va a acabar con nosotros»…  Inevitablemente esta tercera ola, también lleva consigo consecuencias para la población, tanto para su salud como para el resto de los ámbitos en función de las circunstancias personales. Esperemos que sean temporales y las mínimas posibles. 

Las autoridades sanitarias advirtieron de que las navidades iban a pasar factura,   ¿a qué cree que es debido tanto contagio?

Era previsible que esto sucediera si se relajaban las medidas adoptadas, permitiendo la movilidad durante los días clave del año en los que se producen más contactos entre familiares. Sin necesidad de ser expertos en la materia o sanitarios, sabemos que los momentos clave para que se produzca un contagio de Covid-19 son en aquellos en los que nos quitamos la mascarilla, ya sea para comer o beber.  En estas fechas, por tradición, la gente se junta para ello. Se preveía que iba a tener las consecuencias que estamos sufriendo. A la vista está que no podemos dejar en manos de la población y de la responsabilidad individual el control de una pandemia, principalmente porque la imprudencia de unos pocos la pagan muchos, y que las medidas de contención las tienen que establecer firme y claramente las diferentes administraciones sanitarias, que han tenido que endurecerlas. 

Algunos sectores económicos consideran muy drásticas estas medidas, ¿piensa que hay alguna solución diferente que haga descender la curva de contagios? 

Ojalá hubiera una solución diferente a esta pandemia sin que sectores tan importantes se vieran afectados, como comercio, turismo y hostelería. Hemos podido comprobar lo que sucede cuando nos confinan o se toman medidas restrictivas, como el cierre perimetral o la reducción de aforos, entonces disminuye claramente el número de contagios y se produce un control de la situación a nivel asistencial  y epidemiológico.

Ustedes han puesto de manifiesto que hay problema para atender desde la enfermería todas las camas de críticos,  ¿se puede colapsar este área u otras del hospital?

Confiamos en que la Gerencia de Asistencia Sanitaria haya aprendido de la primera ola,  sabemos que está trabajando para que esto no suceda y no se llegue a colapsar,  por el bien de los profesionales y de la población. Evidentemente, la situación de esta unidad, entre otras, nos preocupa por su ocupación actual, porque a día de hoy está siendo necesario trasladar pacientes a otras provincias e ingresar en camas de reanimación a enfermos con patologías diferentes a la Covid y ddicar el resto de camas de UCI a pacientes Covid.  Esto está suponiendo que hay reforzar estos servicios con más enfermería, entre otros profesionales, para intentar asegurar una atención de calidad y ratios seguras paciente/enfermera que en UCI es de dos pacientes por cada una. Del mismo modo, que en el resto de servicios y hospitalización están sufriendo un aumento de la presión asistencial y es necesario reforzar algunos turnos  a costa de que los compañeros que se encuentran librando tengan que cubrirlos.

¿Esta tercera ola va a influir en el funcionamiento ordinario del hospital, donde ya de por sí se ha alterado el tratamiento de otras patologías, como en la atención primaria?

Así es, cuando el elevado número de casos aumenta considerablemente y produce un aumento de ingresos tanto en hospitalización como en UCI se necesita de una reorganización de la actividad asistencial que se presta para asegurar una atención de calidad a los pacientes que ingresan.  También, está alta incidencia de Covid en la provincia hace que la asistencia sanitaria desde la Atención Primaria se vea mermada, por ejemplo en funciones de prevención y promoción de la salud, entre otras,  al requerir centrar los esfuerzos de la enfermería en la detección, control y seguimiento de casos probables o confirmados de coronavirus, campaña de vacunación y, por supuesto, simultanear todo esto con el resto de las funciones de la enfermería en Primaria, como el seguimiento del paciente crónico. Está siendo realmente duro y complicado para los profesionales llevar a cabo todas estas tareas simultáneamente. La enfermería de Segovia, continúa realizando un esfuerzo titánico para contener y vencer la Covid-19. Alcanzar todos estos objetivos y con la mayor calidad posible, ya sea desde la Atención Primaria, Hospital y centros sociosanitarios está siendo realmente duro, no lo olvidemos.

Se ha comenzado con la vacunación pero parece que a un ritmo lento y con la enfermería dedicándose a tiempo parcial...

Ahora mismo quiero confiar en que se tomarán las medidas necesarias para reconducir la campaña de vacunación frente al SARS-CoV-2 porque es evidente que no se ha empezado con buen pie. Somos la provincia con menor número de dosis puestas de la vacuna a nuestros mayores. Y esto no es bueno. Desde Satse queremos dejar claro, que esta campaña se ha de llevar a cabo de manera ágil, eficaz y con las suficientes enfermeras y enfermeros. No podemos vacunar únicamente unos pocos días de la semana y solo de mañana. 

Si queremos llegar a tener al menos al 70 % de la población inmunizada al final del verano, tal y como pretende el Gobierno,  o nos ponemos 'las pilas' a vacunar de mañana y tarde y todos los días de la semana que se pueda, o no lo conseguiremos.  Otro problema añadido, y que nos está marcando la diferencia en cuanto a la velocidad de vacunación con respecto a otras provincias, es la dificultad para realizar nuevas contrataciones de enfermería. Como ya es conocido, y venimos denunciando desde Satse, la bolsa de empleo lleva meses agotada por lo que las administraciones sanitarias tienen que establecer los mecanismos para que se lleve a cabo con los profesionales de enfermería que se encuentran actualmente contratados y en plantilla. 

Por su puesto, si esto lo van a realizar en sus días libres y de manera voluntaria, que la compensación económica sea acorde con el sobreesfuerzo realizado. Pero lo más importante, es que no nos olvidemos que la vacunación es algo tan inherente y propio de la enfermería de Atención Primaria que no podemos ni debemos dejar de lado a los profesionales que integran los equipos de los diferentes centros de salud que quieren, deben y pueden vacunar de la Covid-19 al sector sociosanitario y a su población, de la misma manera que han sido ellos quienes han afrontado las diferentes campañas de vacunación, incluida la de la gripe.  Así se lo hemos transmitido a la Dirección de Enfermería de Atención Primaria y así se lo vamos a manifestar al Gerente de Asistencia Sanitaria. Si se dieran estas circunstancias habría personal de enfermería suficiente para hacer frente a la campaña de vacunación de manera ágil, eficaz y segura.

En este momento, en una situación de contagio comunitario será complejo el trabajo de seguimiento desde la Atención Primaria, ¿cómo se soluciona?  

No olvidemos que la Atención Primaria juega un papel clave en la contención del virus, es el primer nivel asistencial y que ahora mismo está teniendo que afrontar tanto la campaña de vacunación contra el SARS-CoV-2 como la detección, control y seguimiento de casos positivos y sospechosos. Todo ello con los mismos recursos humanos que teníamos hace dos meses, por lo que el trabajo está siendo muy complejo y duro. La solución pasa por reforzar todo lo que se pueda y habilitar todos los mecanismos necesarios de apoyo para conseguir controlar esta tercera ola.

Ustedes han denunciado que continúa la guerra entre la Consejería de Sanidad con los trabajadores de Sacyl y que se siguen habilitando medidas no negociadas, ¿acabará alguna vez el conflicto?

Para que un conflicto del tipo que sea finalice es necesario buena disposición por ambas partes, sin duda. Y ahí, es donde radica el problema, el diálogo por parte de la Consejería de Sanidad brilla por su ausencia. Habilitar medidas no negociadas con los representantes de los trabajadores que afectan a sus condiciones laborales y retributivas no se puede considerar 'buena disposición', es la principal causa del enfrentamiento. Previamente se ha planteado a los trabajadores que renuncien a los descansos generados por los excesos de jornada que han tenido que realizar a lo largo del 2020, especialmente duro para los sanitarios, y a los días de permiso a los que tienen derecho, a un coste realmente irrisorio, a la vez que se miente a los trabajadores diciendo que se ha llegado a un acuerdo retributivo, cuando en ningún momento se ha producido un acuerdo retributivo entre las organizaciones sindicales y la Gerencia Regional.

La mala gestión de la crisis sanitaria que estamos viviendo en esta Comunidad no se limita a la pérdida de derechos del personal sanitario, si no que se ve reflejada en la falta de previsión existente en cuanto al plan de vacunación frente a la Covid-19. No existe información sobre la existencia de un plan unificado y centralizado por parte de la Gerencia Regional, desconociéndose a fecha de hoy cómo se va a llevar a cabo la vacunación de los sanitarios que se encuentran en primera línea.

En cuanto a las infraestructuras sanitarias en los Presupuestos de Castilla y León el PP y Cs han incorporado enmiendas para incluir partidas, cortas en algunos casos, ¿confía en que puedan ser una realidad?.   

Son bienvenidos todos aquellos proyectos, mejoras y medidas que vayan encaminadas a mejorar las prestaciones sanitarias e infraestructuras. Confiemos que será así,  pero sin olvidarnos que las nuevas instalaciones tienen que ir acompañadas de la dotación necesaria de profesionales. Desde el Satse siempre apostamos y defendemos que se trabaje para dotar a nuestro sistema público de todo lo necesario para prestar la asistencia sanitaria que los ciudadanos se merecen. Y sin duda, los segovianos se merecen que las diferentes administraciones trabajen duro para conseguir que Sacyl puede ofertar la radioterapia en Segovia, lo antes posible. La necesidad es real y palpable. 

Todas estas instalaciones necesitarán personal, Segovia carece de enfermería, ¿cómo cree que se podrán cubrir las plazas?

Ha tenido que haber una pandemia para que seamos conscientes del grave problema que supone este déficit en personal de enfermería. En Segovia tenemos el problema añadido de que somos la única provincia de toda España que no tiene implantado los estudios de Grado en Enfermería. Confío en que para el próximo curso académico se implante en el Campus 'María Zambrano'. Esto permitiría disponer de aquí a los cuatro años de alrededor 50-60 enfermeras y enfermeros finalizando sus estudios en la provincia, cada año.  Sin duda, también es necesario trabajar en el retorno de los profesionales que emigraron fuera de España. Satse ha elaborado un 'Plan de Retorno y Estabilidad para Enfermeras y Enfermeros en el Sistema Nacional de Salud (SNS)' que pretende propiciar la vuelta de los profesionales emigrados y mejorar las condiciones laborales de quienes se encuentran trabajando que estén pensando en marcharse a trabajar fuera. La propuesta ya ha sido comunicada a las diferentes administraciones, consta de 11 medidas encaminadas a paliar este grave problema con el que cuenta nuestro SNS. Las medidas versan sobre diferentes aspectos, como contratos estables, retribuciones –no olvidemos que Castilla y León es de las comunidades que peor retribuye a la enfermería–, conciliación u ofertas públicas de empleo, entre otras.