Menos de seis horas de 2023 han sido necesarias para que el Hospital General de Segovia viva su primer alumbramiento del año. A las seis menos cinco de la madrugada del pasado domingo 1 de enero venía al mundo Mateo, el tercer hijo de Sara y de Roberto, mucho más apresurado que Wasim, el primer bebé segoviano de 2022, que no nació hasta pasada la una del mediodía del 2 de enero. Ojalá sea un presagio de un resurgimiento demográfico en este ámbito porque los primeros datos que deja 2022 –los únicos proporcionados hasta el momento– no son positivos.

A lo largo del año que acaba de finalizar, el Hospital General de Segovia volvió a registrar un mínimo histórico de partos. Desde 2014 no han dejado de batirse récords negativos en este sentido. 1.000, 968, 928, 884, 852, 847, 812 y 752 ha sido la serie hasta llegar a los 736 partos atendidos en 2022, de los que 566 fueron por vía gaginal y 170 por cesárea. Noviembre fue el mes con más (72) y febrero (46) y julio (47) los peores, según las cifras facilitadas por la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia.

Pero para conocer el número real de nacimientos que se produjeron en 2022 en Segovia habrá que esperar ya que un buen número de segovianas eligen dar a luz en centros privados, principalmente de Valladolid y Madrid. Y el Instituto Nacional de Estadística (INE) publica con un año de retraso las cifras de nacimientos por provincia de residencia de la madre. En diciembre se ha conocido que en 2021 fueron 967 en Segovia, 18 más que el año anterior, en el que por primera vez se bajó del millar dentro de una serie estadística que se remonta a 1941.

El hospital cerró 2022 con un nuevo mínimo histórico de partos

No parece que 2022 haya mantenido esa tímida recuperación. De acuerdo a las estimaciones mensuales que lleva a cabo el INE a partir de las inscripciones realizadas en los registros civiles informatizados, entre enero y octubre –los meses sobre los que hasta ahora hay datos– hubo 689 nacimientos, 122 menos que en el mismo periodo de 2021, 117 menos que en 2020 y 182 menos que en 2019.

Ante estas tendencias fijar y atraer población se ha convertido en la gran obsesión de las administraciones públicas en La España Vaciada. En los últimos años, el Ayuntamiento de Mozoncillo, por ejemplo, concede ayudas por nacimiento y adopción, que en el caso de 2023 alcanzarán los 1.000 euros. Un 'cheque bebé' que probablemente ha ayudado a mitigar la pérdida de vecinos censados que ha sufrido esta localidad segoviana desde 2011. Entonces eran 1.097 y ahora, 858, según los datos del padrón del INE, pero en 2021 llegaron a tener siete habitantes menos (851), la cifra más baja desde que existen registros.

A estas alturas ya no sorprenden todas estas estadísticas negativas. Supone un pequeño consuelo la confianza que tienen los segovianos en el único hospital público de la provincia. Casi ocho de cada diez mujeres segovianas que dan a luz lo hacen en el Hospital General. Una proporción que se mantiene estable respecto a años anteriores y que quizás vaya en aumento en el futuro cuando mejoren las prestaciones del complejo con la construcción de la ampliación prevista. Aunque para eso todavía habrá que esperar unos años  puesto que todavía no están expropiados siquiera los terrenos en los que está proyectada.

Otra variante a tener en cuenta a la hora de analizar estos fenómenos demográficos está vinculada al creciente número de partos múltiples. En el año que acaba de terminar, el número de recién nacidos vivos superó la cifra de partos en el Hospital General, donde vinieron al mundo finalmente 743 niños.