La fábrica de productos de higiene Drylock sorprendía ya en las primeras semanas de crisis sanitaria al confirmar que se disponía a ampliar su plantilla con la contratación de 12 trabajadores más para atender un notable aumento de pedidos de pañales, principalmente. Pero se ha quedado corta y ahora cuenta con contratar a otros 10 por el mismo motivo, así que en total superará los 160, mientas la inmensa mayoría de empresas capea las consecuencias del coronavirus con ERTE u otras medidas que, desde luego, nada tienen que ver con crear empleo, sino con intentar no destruirlo en el mejor de los casos.

Pero los productos de Drylock no sólo se están beneficiando de un mercado creciente en plena pandemia, sino que además esta planta se ha visto beneficiada por recibir encargos que no podían atender otras que tiene la multinacional en Europa por contagios de coronavirus en sus plantillas. La de Segovia, al menos de momento, está entera y sigue creciendo.