Ayllón celebrará el Jueves Lardero

DS
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Es una fiesta popular con la gastronomía como protagonista.

Ayllón celebra el Jueves Lardero - Foto: Julio Sánchez Miguel

Por su emplazamiento estratégico, Ayllón ha sido el lugar elegido durante siglos para importantes reuniones y concilios por autoridades y personajes de todas clases. Los reyes de Castilla y Portugal se reunieron allí para firmar el Tratado de Ayllón, las reuniones de primavera de La Mesta unían en torno al municipio a los más importantes ganaderos y representantes de León, Soria, Segovia y Cuenca y acogía los cónclaves entre los obispos de Osma, Sigüenza y Segovia. Esta última referencia parece ser la culpable de que este jueves Ayllón sea la única villa segoviana que celebra el ancestral Jueves Lardero, inducido además por la cercanía y complicidad con Soria.

"Se trata de una fiesta de la que no está claro el origen, pero en la que todo el mundo sabe el final. Llegar a casa ahumado, helado de frío y con las comisuras de los labios oscurecidas por el vino del porrón", cuenta Jonás Sánchez, vecino de la villa. A lo largo de la tarde se van abriendo las bodegas para llenar de alma las entrañas de 'La Martina' y, al anochecer, las lumbres comienzan a brillar y a iluminar el cerro, inundándolo de vida.

En las bodegas y merenderos abunda la carne de todo tipo, pues es precisamente el centro de la fiesta, por ser el último jueves antes de cuaresma. Las tortillas de chorizo forman parte del menú de todas las casas hasta el punto de servir para almorzar, comer y merendar. Pero toda esta carne y tortilla no se concibe sin la 'tendida', pan redondo y chato muy apreciado que es barnizado con aceite. Tampoco puede faltar el 'cagadillo de monja', dulce típico formado por caramelo de azúcar y frutos secos (en cada casa se eligen unos u otros).

Para una gran parte de los habitantes de la villa es una fiesta especial, incluso para algunos tan esperada como San Miguel y no sería descabellado pensar que en el futuro se pudiera ubicar una de las fiestas locales para dar mayor peso al Jueves Lardero y fomentar su celebración, dado que ya el jolgorio en San Isidro ha decaído.