La selección española de hockey sobre patines cedió (9-10) ante la de Portugal este jueves y dejó escapar un billete a la final del Europeo que tenía en su mano a cuatro minutos del final, dando vida a su eterno rival y obligada ahora a jugarse el pase con un Francia que también aspira a pelear por el título.

El Clásico nunca defrauda y lo demostró una vez más. En la localidad lusa de Paredes, la anfitriona dio la vuelta a un 9-7, con dos goles en el último minuto, para sumar siete puntos, los mismos que España, y aspirar a una final que tiene más cerca Francia (10).

Un triunfo de los de Guillem Cabestany hubiera dejado la final del sábado definida, entre españoles --en busca de su 18º título-- y galos, pero ahora, ambas se jugarán el tipo este viernes en la última jornada, por un gol en propia de Pau Bargalló y otro tanto de José Costa que provocó el éxtasis en la campeona del mundo.

España mandó a la lona varias veces a su rival ibérico. Dos veces se puso por delante el cuadro español en el primer tiempo, pero con mucha pegada, la anfitriona llegó al borde del descanso con 2-4. Una falta sacada rápido y una tarjeta azul permitieron a España empatar en el último minuto (4-4).

La segunda parte trajo a una Portugal aún nerviosa y España logró varias rentas de dos goles. Girao despertó bajo palos y Alves castigó cada penalti o falta directa (6-6 a nueve del final). Bargalló también aprovechó las infracciones y el 9-7 daba medio billete a los españoles, liderados también por Sergi Panadero.

El festival de goles se guardó otra traca para el último minuto, con Costa como héroe de una Portugal que se aferró a su torneo, ahora con un duelo asequible ante Andorra para estar en la final. Un golpe para España aunque tiene aún en su mano la defensa del título.