La Subdelegación de Gobierno ha informado hoy de que la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha dotado a todos los vehículos oficiales de unos inhibidores de sonidos que ahuyentan a los animales salvajes, circunstancia que ha producido desde su instalación, hace aproximadamente dos años, que en su caso sólo se haya constatado un único accidente de circulación producido por la incursión inesperada de animales en la vía.

Actualmente el número de accidentes en la provincia de Segovia, en la que están implicados animales ronda el cuarenta por ciento del total. Este tipo de accidentes se produce principalmente en carreteras secundarias, sin olvidar las vías principales, en horarios y tramos de vía de visibilidad reducida (zonas boscosas y con ocasión de la salida y la puesta de sol).

Estos silbatos se pueden adquirir a través de Internet o en establecimientos dedicados a la venta de repuestos de automóviles, tienen un coste reducido y se instalan fácilmente en la parte delantera del vehículo, emitiendo una frecuencia que ahuyenta a los animales. Por tal motivo y dada su aparente efectividad, la Guardia Civil de Segovia, recomienda la instalación de silbatos de ultrasonidos para animales.