Diez años de caída del CD La Granja

Nacho Sáez
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El club rozó hace una década la clasificación para la fase de ascenso a Segunda B y hoy lucha por no descender a Provincial en pleno auge de otro equipo en el mismo pueblo.

Partido del CD La Granja contra la Cebrereña, el pasado 11 de diciembre. - Foto: Diario de Ávila

Pluma no se ha hecho socio esta temporada del CD La Granja. «Juego y soy directivo del otro club de fútbol del pueblo y ciertas cosas que han pasado en los últimos tiempos no me han parecido bien», señala el excapitán, leyenda del CD La Granja –vistió su camiseta durante dieciséis temporadas– y síntoma del triste momento que atraviesa una entidad en caída libre desde que hace diez años vivió uno de los mejores cursos de su historia. 

En 2013 rozó la clasificación para la fase de ascenso a Segunda División B tras una temporada espectacular. Sin embargo, desde entonces no ha encontrado la estabilidad: dos descensos a Regional, un tenso cambio de presidente, eliminó su cantera, embargos de Hacienda... Hasta el día de hoy, en el que lucha por no caer a Provincial. El equipo que entrena Javier Jadraque ocupa la decimocuarta posición en una competición que cuenta con diecisiete equipos y que probablemente condene al descenso a Provincial a los cinco últimos, aunque podrían ser más en función de los arrastres de la Segunda RFEF.

«El equipo está unido y el cuerpo técnico motivado, pero es verdad que las cosas no están saliendo y que cuando entras en esta dinámica todo es más difícil. O empezamos a sumar o va a ser complicado», apunta el presidente del CD La Granja, Javier Montero. Las dos goleadas consecutivas sufridas en casa (0-3 contra el Racing Lermeño y 1-5 contra el Calasanz de Soria) han terminado de encender las alarmas, pero Montero prefiere quedarse con la buena imagen ofrecida en algunos momentos contra el Calasanz: «El resultado no se correspondió con lo que se vio en el campo. Se hizo un buen partido contra uno de los mejores equipos del grupo, pero pagamos nuestra fragilidad atrás».

A la crisis deportiva se suma una convulsa situación institucional. La Agencia Tributaria ordenó un embargo de los ingresos de la entidad y el otro club de fútbol del municipio, el Real Sitio CF, no ha parado de ganarle terreno en los últimos años. «No estamos bloqueados. A uno de nuestros patrocinadores Hacienda le mandó un requerimiento para que no nos hiciera el ingreso a nosotros, pero estamos funcionando con normalidad», asegura Montero. A la pregunta de si  el club está saneado económicamente, responde que «estamos como casi todos los clubes de nuestra categoría». «Los gastos son los mismos prácticamente que en Tercera pero los ingresos son menores», añade, al tiempo que rechaza dimitir. «La idea de la junta directiva es continuar hasta que acabe el mandato. Vinimos a trabajar, aunque las cosas no han salido como esperábamos. A lo mejor el CD La Granja no es un equipo para estar en Tercera y sí en Regional. Luchábamos contra clubes que nos triplicaban en presupuesto y luego quizás no hay jugadores para tantos equipos como existen en Segovia entre Tercera y Regional», concluye.

Durante las dos últimas décadas, el CD La Granja se convirtió  en uno de los clásicos de la Tercera División. Puro aroma a fútbol humilde respaldado por más de medio siglo de historia. Una trayectoria en la que decenas de jugadores han defendido sus colores. Víctor Roldán, en una de las etapas más brillantes y ahora otra vez, con 40 años. «El gusanillo sigue ahí y el año pasado tenía ganas de jugar. Esta temporada lo iba a dejar, pero me convenció Juan [Folgado, el exentrenador del CD La Granja] porque faltaba gente», cuenta. El mal momento del equipo también se extiende a él, pendiente de cumplir los dos últimos partidos por la sanción de seis encuentros que recibió por agredir a un futbolista del Cristo Atlético B. «Me habían expulsado por una entrada que no era de roja y el jugador del Cristo se rio de mí, me llamó payaso y yo le di con la mano en la cara. Pudo seguir jugando, pero me equivoqué», explica. Como veterano en una plantilla muy joven, sobre sus hombros recae la responsabilidad de liderar la reacción y que el CD La Granja no prosiga su caída.