IE University anunció el pasado viernes que «adoptará medidas del máximo rigor previsto en nuestro código ético si se confirma la gravedad de las informaciones que aparecen hoy publicadas en los medios de comunicación sobre los acontecimientos que tuvieron lugar el pasado fin de semana fuera de nuestro campus». Se refería a la agresión sufrida por varios policías locales cuando el pasado 29 de enero intervinieron en una fiesta en un piso de alumnos de IE y que acabó con dos personas detenidas.

«Estos hechos, por supuesto, no reflejan los valores de la institución académica ni de sus alumnos. Para nuestra institución es un privilegio disfrutar de nuestro campus histórico en Segovia y enriquecer la experiencia de alumnos de 140 países en una ciudad de la que aprendemos cada día. El respeto es una máxima de nuestra institución. Seguimos trabajando para impulsar la educación, la innovación y la investigación como motores del cambio positivo», añadió en su comunicado la universidad, que sin embargo no ha querido ofrecer más información del proceso abierto «por confidencialidad». Según información de los sindicatos, dos policías locales siguen de baja por esta agresión.

Según han informado fuentes judiciales, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Segovia acaba de recibir el atestado policial. Tras ser detenidos, los dos estudiantes de IE University prestaron declaración ante la Policía y fueron puestos en libertad. El delito de atentado contra la autoridad está castigado en el Código Penal con cárcel de uno a cuatro años y multa de tres a seis meses.