Segovia apunta a recuperar a partir de la próxima primavera los niveles de actividad turística que llegó a alcanzar antes de la pandemia; y así puede ser, claro está, siempre y cuando después de la sexta ola no llegue otra peor. Necesitará cierta paz epidemiológica para ganar más turismo internacional y que regresen sobre todo los visitantes asiáticos, cuya ausencia por las restricciones de movilidad que se aplican en sus países (se ven por la ciudad, pero a cuentagotas) resulta determinante para que los indicadores turísticos no manifiesten ya una recuperación plena, o casi. «La recuperación se ha acelerado, pero muy fundamentada en el turismo interior», destacaba el jueves la alcaldesa, Clara Luquero, durante la presentación del balance turístico de 2021 que realizó junto con el concejal responsable del área, Miguel Merino. No en vano, recordó que los extranjeros llegaron a representar alrededor del 45% de los visitantes en años precovid, mientras que en 2021 se quedaron en un pobre 18% debido a un descenso que fue especialmente significativo en lo que a chinos y japoneses se refiere, aparte de estadounidenses y argentinos.
Redondeando, según estimaciones municipales, el turismo creció en Segovia un 50% durante 2021 en comparación con el pandémico 2020, el año del confinamiento duro, que dejó un encefalograma turístico completamente plano durante meses. Pero cualquier conclusión que resulte de poner cifras en relación con el primer año de pandemia queda desvirtuada por el desplome del turismo que provocaron entonces las restricciones económicas.
Por el contrario, si la comparación se hace entre 2021 y 2019, resulta que los indicadores que manejan el Ayuntamiento y la Empresa Municipal de Turismo revelan que la ciudad se quedó en un 50% del turismo que venía recibiendo en 2019. Claro que si se toman como referencia únicamente los respectivos segundos semestres de tales años, ese mismo porcentaje se eleva al 75%. Y eso contando además con que la recuperación ha sido progresiva, de tal modo que los resultados en periodos largos, con análisis de años o semestres en conjunto, se ven lastrados por los extremadamente pobres primeros meses del año pasado y los vaivenes de las olas pandémicas. De hecho, octubre e incluso diciembre de 2021 (a pesar de que ya empezaba la sexta ola) ya dejaron cifras por encima de esos mismos meses de 2019 gracias al aumento del turismo nacional, aunque quede rematar tal recuperación en los próximos meses.
Desde el Ayuntamiento apuntan que son los espacios turísticos más pequeños y menos dependientes tradicionalmente del turismo internacional los que mostraron mejor evolución, e incluso superior a 2019 en la comparativa por semestres. Las visitas a la Casa Museo de Machado, por ejemplo, aumentaron un 7,8% en la segunda mitad de 2021 (con un total de 1.810) en comparación con ese mismo periodo del último año precovid; y la Real Casa de Moneda se anotó crecimientos del 33% y del 55% en septiembre y octubre; mientras que los últimos puentes han arrojado cifras propias de una recuperación casi completa, salvo por la baja presencia de asiáticos.
Por otro lado, ya de cara a 2022, el concejal de Turismo manifestaba el jueves que confía en que la inmunidad generada por las infecciones de Ómicron y el alto porcentaje de vacunación de la población segoviana faciliten posicionar a Segovia como «un destino seguro frente a la covid», algo clave para que se cumpla la previsión de un repunte claro del turismo a partir de primavera. «Podría ser el año de la recuperación definitiva», según las previsiones municipales, y por ello se pretende preparar «una potente propuesta turística».
En este contexto, el concejal de Turismo hizo público el jueves que ha ofrecido a la Diputación la firma de un convenio de colaboración entre la empresa municipal Turismo de Segovia y el órgano de la institución provincial que lleva esta área, Prodestur, con el objetivo de «establecer nuevas alianzas en favor de la difusión turística de los atractivos de Segovia en su conjunto». Precisamente la posibilidad de sacar adelante promociones de paquetes turísticos conjuntos para la capital y la provincia se ha puesto sobre la mesa en no pocas ocasiones en los últimos años pero, aunque no se descubre la rueda con iniciativas como esta y las dos instituciones han mostrado cierta predisposición en otras ocasiones, lo cierto se que no acaban de cuajar. Al menos hasta la fecha, y ahora a la espera de ver qué sucede con esta nueva tentativa y hasta dónde llega.