La oposición urge medidas para un comercio "herido de muerte"

SPC
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Los socialistas plantean un plan de choque y otro a largo plazo frente al "drama" del comercio y PP y Vox critican la política del Gobierno con nuevos impuestos y "persecución" fiscal

La oposición urge medidas para un comercio "herido de muerte" - Foto: Rubn Cacho ICAL

Los grupos Popular y Vox, socios de gobierno en la Junta, defendieron hoy el nuevo plan para el comercio que prepara el Ejecutivo autonómico y rechazaron en el pleno de las Cortes una moción socialista, apoyada por toda la oposición, en la que pedían medidas de choque y otras a largo plazo para salvar a un sector "herido de muerte", especialmente, el de proximidad y en el medio rural.

La iniciativa, con tres puntos, no incorporó la enmienda de Soria Ya para considerar a los bares y comercios de pequeños pueblos como entidades de la economía social, y rompió la unidad de la oposición al efectuarse una votación por separado de un punto del texto en el que el PSOE pedía crear la marca "comercios de Castilla y León", a lo que UPL se abstuvo, mientras PP y Vox votaron en contra y el resto, a favor.

La socialista Alicia Palomo alertó de la situación del comercio en la Comunidad, especialmente el de proximidad. En 15 años, dijo, se han perdido más de 35.000 ocupados, lo que consideró "un drama", que ha hecho que 833 autónomos hayan echado el cierre a sus negocios en dos años y advirtió que esta situación afecta también al medio rural, donde cada vez que desaparece una tienda se deja de prestar un servicio especial para la población.

La Junta, denunció la socialista, permanece "impasible" porque no ha tomado decisiones eficaces desde 2019, lo que ha hecho que se estén "cerrando persianas en todas las provincias", que caigan las ventas y la rentabilidad de "forma exponencial". La procuradora sostuvo que hasta hace un año el sector estaba "mal", pero añadió que ahora con Vox está "peor" y sufre la falta de "diálogo" del consejero "radical", "cazacomunistas", en referencia a Mariano Veganzones.

Alicia Palomo reclamó políticas de revitalización, mediante un plan de choque, inmediato, a dos años, que detenga la "destrucción" de negocios y uno a medio y largo plazo, que dirija el rumbo del sector y le ayude a ser más competitivo y rentable. "Menos mal", dijo, que "las pocas líneas de ayudas que se publican son las del Gobierno de España", a través de los fondos Next Generation.

La 'popular' Mercedes Cófreces hizo un alegato en defensa del comercio de proximidad y explicó que el número de empresas del sector ha decrecido en tres años en la Comunidad, pero señaló que en nivel nacional se ha producido la misma dinámica "regresiva". Reclamó un "clima de confianza empresarial", de "estabilidad" y un marco fiscal favorable al central, criticó la subida de los costes laborales e impuestos y destacó el apoyo de la Junta a través de medidas como el Bono Consumo o las inversiones para la digitalización.

Desde Vox, Fátima Pinacho consideró una "copia" las alegaciones de la Confederación de Comercio para elaborar una propuesta "electoral" porque, señaló, están "en modo campaña". El comercio, insistió, no puede resistir a las zonas de bajas emisiones, la "maraña" burocrática de ayuntamientos, la subida de cuotas a la Seguridad Social o la "persecución" de la Agencia Tributaria. Además, apuntó que las medidas que proponen ya están implantadas, si bien reconoció la necesidad de elaborar una nueva estrategia de comercio para "cuidar lo nuestro".

En representación de UPL-Soria Ya, el soriano Ángel Ceña aseguró que los comerciantes son "supervivientes" porque solo encuentran a la administración en las inspecciones de Consumo. Todo ello, añadió, se agrava en el mundo rural, donde el cierre de una tienda se convierte en una "tragedia". Por ello, planteó una enmienda para pedir la reforma de la ley con el fin de que bares y comercios en municipios de menos 200 habitantes se conviertan en entidades integrantes de la economía social, para que se beneficien de medidas que garanticen su viabilidad.

El procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, consideró "razonable" la propuesta del PSOE porque señaló que el sector se enfrenta "a tiempos difíciles", y demandó medidas que surjan del "consenso" y de la "racionalidad", pero también que se enfrenten a las nuevas situaciones del "centro" de las ciudades, el comercio electrónico o el medio rural.

En nombre de Unidas Podemos, Pablo Fernández respaldó la iniciativa socialista sobre un sector "estratégico", "motor" de riqueza y empleo y que ayuda a la vertebración social. Por ello, criticó que PP y Vox "desprotegen" y "desamparan" al comercio con su "inactividad".