El cantautor pedrazano Lucas Mayoral ha luchado por conseguir su sueño, y lo ha logrado. A mediados del mes de diciembre creó una campaña de micromecenazgo- un sistema de financiación de un proyecto basado en pequeñas aportaciones económicas de diversas personas- con la que buscaba costearse una parte de su primer disco, al que ha titulado 'El alma a bailar'. La cantidad económica que necesitaba era de 3.500 euros, la cual alcanzó el 5 de enero, fecha en la aún se podían seguir realizando donaciones. Al finalizar la campaña a mediados de enero, 130 personas apoyaron su proyecto con una cantidad total de 3.862 euros.

«La idea de la campaña de crowdfunding nace sobre todo para intentar involucrar a la gente. 'El alma a bailar' no es solo mío, está construido por todas aquellas personas que me han apoyado, no solo económicamente sino también motivándome durante toda mi vida para que hiciera mi música», desvela Mayoral. 

Aunque su historia comienza mucho antes de esto. Lucas Mayoral lleva tanto tiempo cantando que no recuerda cuándo empezó. «Llevo cantando desde siempre, y siempre me ha gustado», revela. Una pasión que decidió extender aprendiendo a tocar la guitarra a los 16 años. «Como en Pedraza no había mucha facilidad para ir a clases porque no había ninguna academia cerca salvo Cantalejo, empecé a tocar de forma autodidacta a través principalmente de vídeos de Youtube. Practicaba canciones que me gustaban y luego ya pasé a usar la guitarra como acompañamiento mientras cantaba. Poco a poco fui mejorando y me lancé a tocar en la calle con los amigos y me proponían tocar en algún bar o en alguna fiesta; ahí fue cuando me empecé a profesionalizar. A medida que iba avanzando con la guitarra ya comencé a construir canciones, ni mejores ni peores, pero eran íntegramente mías»

Su música prosperaba, por lo que a raíz de ésto el artista se propuso sacar un disco. «Tanto porque yo quería tenerlo como porque la gente de mi alrededor me animaba a poder grabarlo; así me podrían escuchar no sólo en directo, sino también tener mi música un poco más accesible». 

El proyecto nace en 2020, pero Mayoral se ve obligado a suspenderlo debido a la pandemia sanitaria por la Covid-19. Pero, sin rendirse, el año pasado a estas alturas retomó seriamente la idea con la motivación principal de que sus canciones quedaran perpetuadas  en el tiempo.

La primera de sus canciones titulada 'Pétalos de colores' representa un adelanto de lo que será el nuevo disco y ya puede escucharse en varias plataformas digitales como Spotify o Youtube. A ella se sumará, a lo largo del mes de febrero, el segundo anticipo para dar paso al disco completo que se lanzará a principios de marzo.

La campaña. La campaña de crowdfunding nace con un objetivo principal: hacer partícipe a la gente.
«Como una de las motivaciones era principalmente que la gente de mi alrededor me animaba a hacerlo, decidí que el crowdfunding era una buena forma de por un lado de involucrarles en el proyecto y por otro lado también era una forma de visibilizarlo de una forma más formal, porque yo nunca me he movido excesivamente en redes sociales; por último ya estaba la parte económica, ya que el crowdfunding me está ayudando a sufragar solo una parte de los gastos del disco». 

Hablando del disco, el autor revela que en él se podrán disfrutar nueve canciones con una historia propia por cada una de ellas. «Sí es cierto que todas tienen algo en común, que pretenden realmente poner el alma a bailar, por ello es el eslogan del disco. La canción 'El alma a bailar' muestra lo que yo entiendo como la forma sana de relacionarnos con los demás e intentar mostrarnos tal y como somos, evitando tantos constructos sociales. El resto de las canciones hablan de momentos que he vivido, anécdotas, cómo interpreto las situaciones, etc». 

En la puesta en marcha de este proyecto Mayoral no se olvida de Pedraza ya que, aunque ahora resida en Madrid, muchas de las canciones han sido escritas en la Villa. «Todo el material que he ido generando lo he ido orientando allí, de donde son mis raíces. En el proyecto hemos conseguido implicar a mucha gente del municipio: Chema Lara como productor, Juan Fernández como fotógrafo o Caye Mate como diseñadora del álbum».