El plan fiscal del Gobierno ha suscitado reacciones diversas. Entre otras, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha calificado de «decepcionante» y «escasas» la bajada de impuestos que incluye, la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores creen que van «en la dirección adecuada», y la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado considera que se trata de «parches con corte electoralista». Lo anunciado establece que la tributación de las rentas del capital en el IRPF superiores a 200.000 y 300.000 euros se eleva al 27 y al 28 por ciento, respectivamente. Mientras, para favorecer a las rentas medias y bajas, sube hasta 21.000 euros el beneficio fiscal que hasta ahora se aplicaba en las rentas de hasta 18.000 euros. Además, las rentas del trabajo a partir de 15.000 (1.000 euros más que ahora) estarán exentas del pago del IRPF.
En este tributo se eleva igualmente un cinco por ciento el rendimiento neto de módulos para los autónomos y se incrementa del cinco al siete por ciento la reducción para gastos deducibles de difícil justificación en la tributación en régimen de estimación directa simplificada. El paquete fiscal presentado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez también incluye cambios en el Impuesto de Sociedades, en el que se rebaja permanentemente el tipo nominal del 25 por ciento al 23 por ciento para las pequeñas empresas con una cifra de negocio inferior a un millón de euros y se limita al 50 por ciento la posibilidad de compensar las pérdidas de las filiales en los grupos consolidados.
En la provincia de Segovia, un total de 42.149 personas con ingresos inferiores a 21.000 euros (el 64 por ciento de todos los asalariados) se beneficiarán de las rebajas fiscales, según datos obtenidos de la Agencia Tributaria y proporcionados por el diputado del PSOE por Segovia, José Luis Aceves. En el otro extremo, solo 80 segovianos se verán afectados por el aumento del gravamen hasta el 28 por ciento para las rentas superiores a 300.000 euros.
Para el secretario general de CCOO Segovia, ambas medidas son positivas. «Van en la línea de lo que refleja el artículo 31 de la Constitución: 'Todos contribuirán al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica mediante un sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y progresividad que, en ningún caso, tendrá alcance confiscatorio'. Hacer pagar más a quienes tienen ingresos superiores a 200.000 euros no sé qué impacto tendrá en Segovia, pero entiendo que no son tantas personas. Sin embargo, lo que tributen estas personas si lo tuvieran que hacer las personas con ingresos inferiores a 21.000 euros, para ellas sería un esfuerzo muy grande», reflexiona Blázquez.
El presidente de la Federación Empresarial Segoviana, Andrés Ortega, discrepa. «La rebaja para los autónomos es un pequeño pasito pero insuficiente. Por su parte, el mal llamado impuesto a las grandes fortunas pensamos que puede alejar inversiones y evitar que grandes empresas se queden en España. Pedimos que el Gobierno deflacte la tarifa del IRPF como están haciendo algunas comunidades autónomas, pero lo que se está haciendo es hostigar sistemáticamente a las empresas», valor Ortega.
En opinión de la presidenta de la Cámara de Comercio de Segoviana, María José Tapia, «muchas de las medidas no han sido tomadas pensando en el futuro sino en la cita electoral que viene. En el momento tan complicado que vamos a vivir, ya que el Banco Mundial ha dicho que vamos a tener dos trimestres de recesión seguidos, deberíamos estar pensando en medidas económicas y no políticas», concluye.