Afiliarse no está de moda

Agencias-SPC
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Las cuentas de las formaciones, que perdieron casi 9.000 cotizantes durante el primer año de la pandemia, evidencian que la mayor parte de sus ingresos son de origen externo y proceden de las subvenciones públicas

Afiliarse no está de moda

La confianza de los españoles en los partidos políticos no atraviesa su mejor momento. Una crisis de apoyos ciudadanos que se ha visto recrudecida con la pandemia y que se refleja en los registros oficiales: según los datos de la Agencia Tributaria de la declaración del IRPF de 2020 (realizada en 2021), solo 240.212 contribuyentes se aplicaron la deducción correspondiente a «cuotas de afiliación y aportaciones a partidos políticos, federaciones, coaliciones o agrupaciones electorales» frente a los 248.857 del ejercicio anterior. Es decir, los grupos perdieron un 3,5 por ciento de cotizantes (casi 9.000). 

Esta cifra es sensiblemente inferior a las estadísticas que facilitan las fuerzas, sin actualizar ni detallar. Según ellas, superan con creces la barrera de los 1,5 millones de afiliados ya que mezclan, por un lado, a los que están en situación de alta y baja en el mismo año y, por otro, a los militantes que pagan sus cuotas. Un balance que arroja una amalgama de simpatizantes y que aglutina a los que realizan contribución económica y a los que no. 

A esta cuestión de datos hay que añadir otro aspecto clave: las cuentas publicadas por los partidos políticos evidencian que la mayor parte de sus ingresos no provienen de las cuotas, sino de las subvenciones públicas. Así, el PSOE y el PP solo reciben un 13,3 y un 9,7 por ciento de sus recursos de sus respectivos afiliados. El partido que mayor porcentaje capta por cuotas es VOX, con casi un 30 por ciento, mientras que Podemos es el que menos financiación tiene de sus seguidores, solo el 9,3 por ciento.

Según estos registros, el Partido Socialista es el que cuenta con un presupuesto mayor. En 2021 tuvo un total de 79,3 millones de ingresos de la gestión ordinaria, casi un millón más que el año anterior.

De esa cantidad, 46,24 millones corresponden a ingresos de origen público, por subvenciones anuales de gastos de funcionamiento, aportaciones de grupos institucionales y subvenciones para gastos de seguridad. La financiación de origen privado ascendió a 33 millones y es ahí donde están contabilizados los ingresos por cuotas de afiliados, que ascendieron el ejercicio pasado a 10,62 millones de euros, un 13,38 por ciento del saldo total.

En ingresos para la gestión ordinaria, el segundo partido que más tiene es el PP, con 33,9 millones de euros. En este caso, el grueso también es de origen público, ya que 27,7 millones proceden de subvenciones, mientras que el capítulo privado de los populares es mucho menor que el del PSOE, al ascender a 6,15 millones De ellos, solo 3,3 son por cuotas de afiliados, el 9,7 por ciento del total.

El partido que porcentualmente se financia más con las cuotas de sus simpatizantes es VOX, que alimenta casi el 30 por ciento de su presupuesto anual gracias a sus seguidores. Así, de los 17,46 millones de ingresos ordinarios que declara en sus cuentas, 5,11 millones lo son de cuotas de afiliados.

El resto proviene de subvenciones públicas e ingresos electorales: 8,3 millones para gastos de funcionamiento, 1,8 millones de ayudas electorales; 975.929 euros de los grupos parlamentarios y 414.610 euros para gastos de seguridad.

menos favorecidos. En el extremo contrario se encuentra Podemos, que solo ingresa por cuotas de afiliados el 9,3 por ciento de su presupuesto, es decir 1,33 millones de euros de los 14,28 de los que dispuso para su gestión en 2021. Además, la financiación de origen privado en el caso morado suma 3,18 millones frente a la pública, que supuso 11,1 millones, de los que 10,59 millones fueron de subvenciones.

Por último, el partido de Inés Arrimadas ya refleja en sus cuentas la debacle que lleva sufriendo desde las últimas generales: los ingresos por cuotas de afiliados han pasado de 2,1 millones a 1,47, el 14,64 por ciento del total. Frente a esto, el grueso de los ingresos naranjas es de origen público, 7,86 millones, de los cuales 3,29 millones corresponden a subvenciones para gastos de funcionamiento.