«Solo acierta cuando rectifica», decía a mediados de los ochenta el entonces líder de Alianza Popular, Manuel Fraga, sobre el Gobierno de Felipe González. El tono de crítica que encerraba la frase no ocultaba, sin embargo, la virtud que se atribuye al que posee la humildad de reconocer un error y dar marcha atrás. En el caso del futuro del área de autocaravanas de la Plaza de Toros de Segovia, no parece que todos vayan a aplaudir ese ejercicio de modificación que ha llevado a cabo el Gobierno municipal de Clara Luquero, convencido de una idea en agosto del año pasado y abrazado ahora a la decisión opuesta.
El Ayuntamiento mantendrá en la Plaza de Toros a corto y medio plazo al menos el espacio destinado para que los usuarios de autocaravanas puedan aparcar, proveerse de agua potable y descargar las aguas procedentes del lavado doméstico y del WC. «En los presupuestos no hay partida para su traslado a otro lugar de la ciudad», remarca el concejal de Turismo, Miguel Merino, para enfatizar la decisión adoptada. Es resultado de un proceso de evaluación en el que los responsables municipales han mantenido reuniones con asociaciones de autocaravanistas y vecinos y en el que también han analizado los datos de ocupación del propio aparcamiento.
Su uso creció notablemente con el comienzo de la 'nueva normalidad'. «Pero también hemos comprobado que desde que han bajado las restricciones ese incremento no ha continuado», apunta Merino. Las reservas de autocaravanas para el verano del año pasado en España crecieron un 120 por ciento con respecto al mismo periodo de 2020 y un 53 por ciento con respecto a 2019, el último verano de la normalidad, lo que hace pensar que el gran 'boom' haya pasado. «Nuestro aparcamiento solo está lleno en las fechas señaladas. Semana Santa, puentes...», señala el edil de Turismo del Ayuntamiento de Segovia, quien también desvela que la estancia en la ciudad de esos autocaravanistas es de dos días de media.
Tres lleva en cambio Adilson Amorim, un brasileño que se encuentra de vacaciones en España y que valora positivamente el área de la Plaza de Toros. «Lo único es que el sitio de descarga [de aguas] es un poco pequeño. Además, el domingo se había puesto una autocaravana justo ahí y no nos dejaba a los demás utilizarlo», explica. En Campercontact, una de las principales plataformas de información para autocaravanistas, la mayoría de opiniones también son buenas. «Bonito espacio de estacionamiento despejado para caravana», indica un usuario. «Excelente. Cerca de todo. Amplio aparcamiento», abunda otro. Ni siquiera la presencia del mercado los sábados, que impide estacionar en una parte del área, despierta demasiadas críticas. «Nos paramos al otro lado del estacionamiento y no hubo problema», cuenta uno su experiencia.
Hay más diversidad de opiniones sobre la conveniencia del espacio entre los vecinos. «Entendemos que no es la ubicación más apropiada. Hemos recibido quejas de vecinos porque se utiliza como un área de estancia más que de aparcamiento», revela la vicepresidenta de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos de Segovia, Mayte Mañas. «[Los autocaravanistas] tienen un privilegio tremendo por aparcar en el centro muy cerca de viviendas, pero encima si lo haces no puedes sacar las mesas y comer en la calle. De eso se quejaba los vecinos precisamente», añade. El miércoles a mediodía había aparcados diecinueve de este tipo de vehículos, y los usuarios de uno tenían desplegadas una mesa y una silla.
RESPETUOSO. «El caravanista habitual está concienciado y es respetuoso. El esporádico comete errores por eso, porque a lo mejor es la primera vez que coge una autocaravana y no sabe que hay cosas que no se pueden hacer», defiende el concejal de Turismo, quien considera además que los problemas de convivencia actuales son esporádicos. Entre las razones que le animan a mantener en la Plaza de Toros este espacio destaca la dificultad para encontrar otro emplazamiento que cuente con una de las condiciones más apreciadas por los usuarios. «Es uno de los mejores en cuanto a localización y claro, nos hemos reunido en tres ocasiones entre 2021 y 2022 con asociaciones de caravanistas y proponen cambiar la ubicación pero mantener la cercanía respecto al centro de la ciudad», relata Merino. El Ayuntamiento llegó a barajar el año pasado dos ubicaciones alternativas, pero al menos de momento han quedado descartadas. «Los sitios que nos proponen están protegidos por vistas, se encuentran en medio de paisajes pintorescos o se ven afectados por otras cuestiones urbanísticas».
La cuantía de la inversión necesaria para ejecutar el traslado tampoco ha pasado por alto. «Habría que rentabilizarla. Si ponemos seguridad o creamos una nuevas instalaciones en otro lado, los usuarios tendrían que pagar. Y ahí entraríamos en conflicto con empresas que se dedican a esta actividad económica», asevera el propio concejal de Turismo, que reconoce las carencias que arrastra el área en la Plaza de Toros. «Somos conscientes de que está un poco justo de espacio, de que hay un margen de mejora en la gestión del ciclo de las aguas y de que es un aparcamiento en pendiente, lo que dificulta poder dormir allí o la misma gestión de las aguas en determinados modelos de autocaravanas».
Pero esa va a seguir siendo su ubicación a pesar de que la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos aún albergaba esperanzas esta semana de un cambio. «En septiembre hablamos con Miguel Merino y le trasladamos las quejas de los vecinos. Después se lo hemos recordado un par de veces más –igual que el tema de los aparcamientos disuasorios–, pero no hemos obtenido respuesta. Estamos dispuestos a buscar la mejor solución», asegura su vicepresidenta.