La Virgen del Castillo ha regresado a su iglesia tras tres días en su ermita. Bernardos ha batido sus propios récords en los tres kilómetros que separan los dos lugares con una procesión que se ha extendido desde las 19.30 horas del martes 7 de junio, cuando la talla de la Virgen salía de su ermita en el Cerro del Castillo, hasta alrededor de las 15.30 horas del miércoles 8, una duración de alrededor de 20 horas. Pero siempre bien acompañada. Vecinos, danzantes, santeras, jóvenes o ancianos, unidos por una tradición. Además, siempre con música. Siete grupos se han turnado durante las horas que ha durado la 'Bajada' para que a la imagen de la Virgen no la faltaran canciones: dulzaineros Hermanos Ramos, dulzaineros del Llano, dulzaineros Zarzuela del Monte, dulzaineros de la Charanzaina, dulzaineros de Zarzuela del Pinar, charanga Jaleo y charanga Cubalibre.

Alrededor de las 4 de la mañana la Virgen atravesaba el primero de los arcos florales y entraba en el pueblo acompañada de la expectación y emoción de muchos de los vecinos y visitantes que no se querían perder este momento tan especial tras los aplazamientos sufridos debido a la pandemia sanitaria.

Esta tradición, declarada Fiesta de Interés Turística Provincial, se va alargando con los años ya que, en el año 2000 duró 16 horas y 37 minutos; mientras que en 2010 se alcanzaron las 19 horas y 26 minutos.

Más de 24 horas bajando a la Virgen del Castillo

Con la entrada de la Virgen a su iglesia, Bernardos pone fin a cinco días de celebración, teniendo que esperar ocho años, esta vez algo menos, para poder volver a vivir esta tradición tan arraigada en la localidad.