Momento para el autorefuerzo del Nava

Nacho Sáez
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Afronta las dos últimas jornadas con la tensión del descenso, que trata de combatir con la difusión de mensajes positivos en su plantilla.

Andrés Moyano, el pasado sábado durante el partido contra el Bada Huesca. - Foto: Daniel Pérez/ Club Balonmano Nava

Hasta en Nava de la Asunción, uno de los lugares que mejor sabe lidiar con la derrota –después de cada partido en el Pabellón Guerreros Naveros los jugadores visitantes se acercan a saludar al público con independencia de cuál haya sido el resultado–, aflora la tensión en la recta final de la temporada. El brazo se encoge más de lo habitual y la respuesta de las piernas se ralentiza. «Hemos tenido tres oportunidades para dejar cerrada la permanencia, no las hemos aprovechado y la gente está en tensión, preocupada e inquieta. En este momento de la temporada lo que tratamos de transmitir son mensajes positivos, de autorefuerzo, pero es inevitable que los jugadores estén nerviosos y no desarrollen igual su juego que si estuviésemos en una dinámica positiva, que te encuentras más suelto», resume Zupo Equisoain. 

El equipo que dirige, el Viveros Herol Nava, afronta las dos últimas jornadas del campeonato liguero situado en puesto de promoción, con un colchón de un punto respecto a las posiciones de descenso directo y a una distancia de dos de la salvación. El primer 'match ball' lo afronta a domicilio contra el Balonmano Benidorm (sábado, 17.00 horas), cuarto en la tabla y candidato a entrar en competiciones europeas.

«Es un partido muy complicado porque a Benidorm le quedan dos partidos y si gana uno se meten en Europa», explica Equisoain, consciente de que el destino más probable de su equipo es la promoción de descenso. «Necesitamos un punto entre los dos partidos [para asegurar la promoción]. Siempre que el Sinfín pierda en el Palau». Adrián Rosales y Tsanaxidis acaparan los problemas físicos de un Nava que está pagando su mala segunda vuelta. Tan solo ha sumado cuatro puntos en la última mitad de la competición. «Parecemos niños. Hacemos unas cosas que no tienen nombre y así estamos perdiendo puntos continuamente», se desahogó Equisoain el pasado sábado después de que su equipo cayera contra el Bada Huesca al desperdiciar con empate a 29 un ataque que incluso le podía haber permitido ganar el encuentro.

Tras el partido ante el Balonmano Benidorm, aguarda al final del camino el Anaitasuna, que visitará Nava en la última jornada. «Ojalá que ganemos en Benidorm, pero podría repetirse lo del año pasado, que nos jugamos la permanencia en casa contra ellos. En ese caso el pabellón se llenará», se consuela Equisoain.