La vacunación de los niños de menos de 12 años ha arrancado con un nivel de respuesta a los llamamientos que puede dejar dudas en una lectura rápida de los datos, aunque las autoridades sanitarias aseguran que todavía es pronto para sacar conclusiones. A la primera jornada, la del miércoles, «acudieron aproximadamente un 50% de los que habían sido convocados a nivel provincial», según apuntaba este jueves a El Día el gerente de Asistencia Sanitaria, Jorge Elízaga. «En el pabellón Pedro Delgado se esperaban un máximo de 700 y fueron unos 350», pero previno de lecturas negativas. «El primer día de llamamiento suele pasar esto. Dado que una vez te han convocado puedes ir ya en los días siguientes, pues luego va incrementándose el flujo, pero este primer día fueron un 50% de los convocados».
La estadística oficial publicada por la Junta sobre la jornada del miércoles refleja que en Segovia se habrían administrado 385 primeras dosis, si bien el jefe del servicio territorial de Sanidad, César Montarelo, advirtió que la cifra total puede ser algo superior por retrasos que suelen producirse en los registros hasta su completa actualización. Asimismo, coincidió con Elízaga en relativizar el hecho de que la mitad de los convocados no acudieran. «También debemos tener en cuenta que los que se contagiaran en los últimos seis meses aún no deben recibir vacuna, y luego es verdad que probablemente no lleguemos a alcanzar un nivel de cobertura como el del grupo de 12 a 19 años», que ya se sitúa en un 86-88% (hombres-mujeres) con primeras dosis y en un 82-84% con pauta completa. Por encima de la media del conjunto de la población segoviana: 82,36% en primeras dosis y 80,36% con pauta completa, siempre según datos oficiales publicados este jueves.
Las autoridades sanitarias, obviamente, son conscientes de que la administración de la vacuna contra el coronavirus en los niños siembra especiales dudas por entre los padres. «Pero es una vacuna segura, la dosis que se inyecta es un tercio de la que reciben los mayores de 12 años y se ha comprobado fehacientemente que no tiene efectos secundarios reseñables», argumentaba el gerente de Asistencia Sanitaria el mismo miércoles, preguntado por la prensa a las puertas del hospital, horas antes del comienzo de la vacunación infantil. «Siempre puede tener algún efecto secundario, como cualquier medicamento, pero es muy infrecuente», añadió.
Los llamamientos que se han llevado a cabo hasta ahora corresponden a los niños de 11 a 8 años, con los cuales se espera terminar entre el 21 y el 22, pero con idea de convocar una recaptación al día siguiente, y contando con que una vez citados, queda abierta la opción de acudir en días posteriores si no se ha hecho cuando toca.
Después tocará continuar con edades inferiores y, según añade el jefe del Servicio Territorial de Sanidad, aún está por verse si se les convoca antes de que acabe el año. De momento, Segovia dispone de una remesa de 6.000 vacunas infantiles y Sanidad maneja un censo de 5.863 niños de 8 a 11 años en la provincia, así que «tendrían que acudir todos para agotarlas», afirma Montarelo, de ahí que no descarte que se pueda llamar a más pequeños antes de 2022. Dentro de la franja autorizada, de 5 a 11 años, el censo de referencia para Sanidad asciende a 9.761 niños.
Por otra parte, el Ministerio de Sanidad autorizó el jueves terceras dosis para los grupos de 50-59 y 40-49 años, así como para los que recibieron segunda dosis de AZ (médicos, policías, guardias civiles, bomberos, profesores...). Estos últimos «serán los prioritarios la próxima semana», según avanza Montarelo, una vez que esta semana ya se terminó con los mayores de 60; y a continuación, sin fechas cerradas aún, nuevos llamamientos por edades.
contagios disparados. La Consejería de Sanidad sigue valorando la vacunación como la mejor defensa contra la covid, pero no basta por sí sola, dada la pérdida de anticuerpos con el paso de los meses desde el último pinchazo, las nuevas variantes y la brecha vacunal que causan los que deciden no ponérsela. Así está escalando la sexta ola, que en Segovia ya dejaba este jueves una tasa de incidencia acumulada de 427 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, por debajo de las medias de Castilla y León (656) y España (473), pero más del doble que una semana antes (192), subiendo con fuerza en este y en casi todos los territorios.
«Si no fuera por la vacunación, esto sería un caos», decía el jueves el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, y resulta especialmente llamativo que el año pasado, con fecha 16 de diciembre, la IA14 de Segovia estaba en 107 casos, una cuarta parte de la de ahora. Cierto que en el hospital la presión asistencial sigue contenida (11 pacientes covid el jueves) y las vacunas moderan los síntomas pero, como apuntó Igea, lo peor de esta sexta ola aún está por llegar.