El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, reiteró ayer en Madrid su apuesta por una bajada de impuestos y para ello exigió un nuevo modelo de financiación autonómica que permita una armonización fiscal «a la baja» entre autonomías.

Mañueco expuso que se debe afrontar un nuevo modelo con más recursos que permita bajar impuestos y la armonización fiscal entre todas las autonomías «tirando a la baja», porque las políticas tributarias al alza son «fracasadas y al final lo que generan es más paro», aseguró.

El dirigente castellano y leonés, que acudió a la toma de posesión de la nueva presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, destacó que la autonomía vecina «está haciendo uso de su prerrogativa autonómica y la capacidad que tiene de bajar impuestos». «Yo creo en la bajada de impuestos», insistió, y recordó su apuesta por la eliminación de sucesiones entre familiares cercanos y una bajada del IRPF y Actos Jurídicos Documentados.

El jefe del Ejecutivo autonómico defendió que «la política de bajada de impuestos está en el adn del PP» y afirmó que esta política es «positiva para estimular la economía, para que florezcan nuevas empresas y se creen nuevos empleos». «Es importante porque esas políticas de bajadas de impuestos permiten el estímulo de la actividad económica y del empleo y todo eso permite a su vez la garantía de los grandes servicios públicos y la apuesta por el bienestar social de nuestra tierra», resumió.

Fernández Mañueco recordó que en la campaña electoral y en su investidura se comprometió a la supresión del impuesto de sucesiones entre familiares y a la bajada progresiva del IRPF a medida que el crecimiento económico lo permita, así como a reducir otros impuestos como el de Actos Jurídicos Documentados para la compra de primera vivienda en el mundo rural.

«Son políticas eficaces que permiten el asentamiento de empresas, la creación de empleo y el asentamiento de familias en nuestro territorio», indicó, para abogar por una apuesta decidida por una fiscalidad más favorable en el mundo rural, tanto en impuestos autonómicos como estatales.

Una apuesta, repitió, que requerirá de un nuevo modelo de financiación autonómica, que «incorpore nuevos recursos, más recursos para la gestión de los servicios públicos, y una armonización a la baja entre todas las autonomías».

Nuevo Gobierno.

Para ello, el presidente castellano y leonés exigió la conformación de un gobierno en España, porque las autonomías necesitan contar con un presupuesto para poder gestionar sus servicios públicos.

Mañueco insistió en que es «fundamental que haya gobierno en España» y recordó que el mandato para conformar el nuevo ejecutivo corresponde al socialista Pedro Sánchez.

Así, constató que es Sánchez quien «tiene que ofrecer una política de mano tendida y buscar el camino de la moderación o de la radicalidad, que es lo que parece que pretende el PSOE en los últimos tiempos, como se ha visto en Navarra», según informa Ical.

Finalmente, Mañueco felicitó a la «flamante» presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y puso de manifiesto su compromiso de colaboración entre las dos autonomías. «Debemos trabajar de la mano como hemos venido haciendo durante los últimos años», dijo.

El presidente de la Junta garantizó que trabajará «codo con codo» con Ayuso, y lo mismo ambos gobiernos, porque tienen por delante «un gran proyecto de futuro que se llama España», que «vamos a construir entre Madrid y Castilla y León».