El Constitucional busca presidente para su nueva etapa

EFE
-

Los magistrados Cándido Conde Pumpido y María Luisa Balaguer se disputarán el liderazgo de un Tribunal que deberá fiscalizar temas como la eutanasia, la ley Celaá o el Ingreso Mínimo

El Constitucional busca presidente para su nueva etapa - Foto: Juan Carlos Hidalgo

El Tribunal Constitucional arranca mañana una nueva etapa con la incorporación de cuatro magistrados, lo que implica un cambio en el equilibrio de fuerzas en favor del bloque progresista, de siete a cuatro, tras casi una década de mayoría conservadora en la Corte de Garantías.

En concreto, desde junio de 2013, cuando se renovó el tercio que correspondía al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y al Gobierno, entonces liderado por Mariano Rajoy, en una decisión que terminó con años de mayoría progresista, de la misma forma que ahora sucede, pero a la inversa, con Pedro Sánchez en el Ejecutivo y el fin de la mayoría conservadora.

Los cuatro nuevos magistrados son el exministro de Justicia Juan Carlos Campo y la catedrática y exalto cargo de Moncloa Laura Díez, propuestos por el Ejecutivo; y los jueces César Tolosa y María Luisa Segoviano, elegidos por el CGPJ.

Recibido el aval del Pleno y tras jurar y prometer su cargo ante el Rey Felipe VI, los nuevos magistrados tomarán posesión mañana certificando la nueva composición del Constitucional, con siete magistrados progresistas por cuatro conservadores, a la espera de que el Senado nombre a otro tras la salida del conservador Alfredo Montoya por enfermedad y que en principio debería ser parte de ese bloque, dejando el equilibrio de fuerzas 7 a 5.

Pero antes de arrancar esta nueva etapa, el Tribunal deberá elegir al nuevo presidente del Constitucional, que tendrá que fiscalizar en los próximos meses la agenda social de Sánchez: desde la eutanasia a la ley Celaá, la ley de la Infancia o el Ingreso Mínimo Vital, con el polémico recurso del aborto parado en el Tribunal de Garantías 12 años y aún sin fecha para resolverlo.

El puesto se lo disputarán el magistrado Cándido Conde Pumpido, a quien desde hace meses se le daba por futuro presidente, y la magistrada María Luisa Balaguer, quien en los últimos meses ha hecho público su intención de postularse a la Presidencia.

Juego de poder

Resulta que no es una cuestión baladí, habida cuenta de lo sucedido estos últimos meses con el bloqueo a la renovación del TC, ya que la estrategia de los vocales conservadores pasaba por vetar al candidato progresista José Manuel Bandrés para frustrar así la aspiración de Conde Pumpido a presidir el Constitucional, ya que este magistrado era muy próximo a él. Los vocales han conseguido lo primero, lo segundo está por ver.  

Porque se da por hecho que los cuatro conservadores no votarán por Conde Pumpido, que se ganó cierta enemistad con anteriores jueces conservadores por su cercanía con el PSOE tras ocho años como fiscal general durante la etapa de  Zapatero. Sus votos irían así a Balaguer, una magistrada con una ideología reconocida pero alejada del foco de los partidos. Y en cuanto a los cinco progresistas, la tendencia apunta a apoyar a Pumpido.

Sea uno o el otro el elegido, lo que es seguro es que mañana se pondrá punto y final a la etapa de Pedro González Trevijano tras un año de mandato que culmina sin haber logrado llevar al pleno el borrador de sentencia del aborto, como era su intención, y con un tribunal más polarizado que nunca.