Mesenor amplía la producción de pienso en Carbonero

A.M.
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Con una inversión en torno a los 4,5 millones de euros, financiados con fondos propios y reservas de la cooperativa, las obras se podrán inaugurar a finales de verano

Situación actual de las obras junto a la primera fábrica en la finca de la cooperativa en término de Carbonero el Mayor - Foto: Rosa Blanco

La cooperativa Mesenor, vinculada a la Unión de Campesinos de Segovia (UCCL) está ampliando la fábrica de piensos con unas nuevas instalaciones junto a la antigua, inaugurada en 1992, ubicada en una superficie de 20.000 metros cuadrados, en término de Carbonero el Mayor, que le permitirá terner tres líneas independientes de fabricación. 

Con un proyecto que parte de la época más dura de la crisis sanitaria, en el que se van a invertir alrededor de 4,5 millones de euros, con fondos propios y reservas de la cooperativa, según su presidente, Rafael de Frutos, la inauguración se prevé para finales de verano.  En la actualidad está ejecutado en torno al 50-60% del proyecto.  

Inicialmente, el planteamiento fue crear una nueva línea que se iba a sumar a la que existe en la actualidad, pero han sido dos más, lo que se convertirá en una fábrica nueva junto a la que existía, de acuerdo con De Frutos, quien reconoce que debería estar acabada ya pero la paralización de la actividad económica por el confinamiento  provocó retrasos en el abastecimiento de material, junto al aumento del coste de transporte aparte de que no se encontrabas empresas que estuvieran dispuestas a llevar a cabo la obra y de que eran reacias a dar presupuestos.  Según el presidente de Mesenor, «hubo algún momento en el que se nos pasó por la cabeza tirar la toalla antes de comenzar».  

Reconociendo que, en la actualidad es complejo seguir trabajando en la fábrica actual y mantener el suministro, mientras se lleva a cabo la obra, para el responsale de la cooperativa se van a conseguir tres líneas distintas de producción, cada una con su molino y granuladora independiente, aparte de triplicar la capacidad de almacenaje en grano y en  producto terminado, lo que les permitirá poder competir en precio en el mercado con el 99% de las fábricas de pienso de Segovia, una actividad que está muy extendida en la provincia. 

Con la línea actual se puede fabricar pienso para diferentes tipos de ganados pero ello conlleva tener que cambiar elementos de la maquinaria, lo que entorpece el ritmo de fabricación. De Frutos subraya que, cuando concluya el proyecto, habrá tres líneas permanentes e independientes para pienso de conejos, cerdos y vacas lo que imprimirá agilidad en la fabricación y abaratará costes. 

El presidente de Mesenor explica que «la idea es conseguir una producción que nos permita llegar a sectores que teníamos un poco desatendidos». Por ejemplo se refiere a las vacas nodrizas que necesitan un tipo de pienso complementario especial en forma de taco que precisa cambiar toda la estructura de la granuladoras y de las cribas.    

Actualmente, Mesenor comercializa pienso, materia primas, servicios veterinarios, medicamentos y, además, cuenta con dos líneas de productos terminados: leche envasada y preasados de cochinillos, cordero y conejo. Asimismo actúan como primeros compradores de leche,  terneros,  cerdos y  corderos de sus socios y comercializan los productos de éstos, por mayorista, a través de mataderos, y con las líneas minoristas de productos terminados, que se pretende ir ampliando. 

Con una facturación anual entre 67 y 70 millones de euros, según los datos que baraja De Frutos, Mesenor cuenta con 350 socios, creciendo en los últimos cinco años, cuando la cifra era de unos 300, en un entorno en el que cada vez cierran más explotaciones. 

La cooperativa Mesenor comenzó a principios de los años ochenta del siglo pasado, cuando un grupo de ganaderos de la Unión de Campesinos de Segovia decidió comprar en común el pienso para sus granjas. Con el tiempo pasaron a comprar directamente las materias primas, a controlar la formulación y el proceso de fabricación. Así, en 1990, nació la cooperativa con las iniciales de Meseta Norte. A partir de la construcción de la fábrica, se empiezan a desarrollar los demás servicios que van demandando los ganaderos.  Tras las obras, la cooperativa podrá atender el doble de la demanda actual, garantizando el servicio a todos los ganaderos que lo necesiten, lo que ahora no podían garantizar completamente.  

Rafael de Frutos considera que, a pesar de la crisis, los proyectos hay que llevarlos a cabo cuando el mercado no lo demanda para que, cuando llegue el momento, «estemos preparados, hay que comer todos los días y no solo eso sino que si en el planeta éramos 8.000 millones de personas, hace diez años, y ahora estamos cerca de los 9.000, hay que producir alimentos», ha matizado.

Para el presidente de Mesenor «los ciudadanos deben tener muy claro que se han acabado los precios baratos en la alimentación,  no puede ser que una explotación ganadera pueda vender a los mismos precios cuando se le ha triplicado el coste de producción, en dos años, eso significa la desaparición de todas las explotaciones; entonces cuando veamos que éstas se cierran los lineales de los supermecardos aparecerán sin leche, sin carne, sin pescado y sin fruta».

Quien también ha sido responsable de ganadería de Unión de Campesinos de Segovia-UCCL, afirma que no se puede sostener la situación actual en la que un botellín de agua mineral se vende en el supermercado a un precio más alto que un litro de leche. 

A su juicio, «esto no tiene lógica ninguna, los ganaderos de leche se están hartando, se están marchando, se cierran las explotaciones, actualmente, en Segovia no quedarán hoy ni 25 ganaderos de leche y, en 1986, cuando España entró en la Unión Europea, había unas 350 granjas».