Bernardos inicia su gran fin de semana de fiesta

DS
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El presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, entrega al municipio el distintivo de Manifestación Tradicional de Interés Cultural Provincial.

Bernardos inicia su gran fin de semana de fiesta

"Si hay alguien en esta provincia capaz de desafiar al tiempo, esos sois los habitantes de Bernardos", manifestaba ayer el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, al dirigirse a los vecinos de la localidad, unos minutos después de inaugurar el nuevo puente de Bernardos e instantes antes de hacerle entrega a su alcalde, José Luis Díez, del distintivo que declara a La Subida de la Virgen del Castillo como Manifestación Tradicional de Interés Cultural Provincial.

Más de dos años después de que el Instituto de la Cultura Tradicional Segoviana Manuel González Herrero diese el visto bueno a la propuesta presentada desde el municipio y de que, el 27 de febrero de 2020 el Pleno de la institución provincial aprobase por unanimidad sumar esta fiesta al exclusivo catálogo que hasta entonces completaban la Ofrenda de los Cirios de Santa María la Real de Nieva, la Octava del Corpus de Fuentepelayo y El Diablillo de Sepúlveda -y al que este año se ha sumado Los Santos Inocentes de Juarros de Voltoya-, Bernardos recibía por fin el marchamo que, tal y como afirmaba De Vicente "garantizará conservar fortalecido un vínculo de Bernardos con su Historia".

Creada en 2013 al amparo del artículo 2 de la convención de 2003 de la UNESCO para la salvaguardia del patrimonio cultural e inmaterial, la declaración de Manifestación Tradicional de Interés Cultural Provincial que otorga la Diputación pretende reconocer aquellas fiestas de la provincia "cuyo contenido tenga un marcado acento cultural y ayuden a conformar nuestro acervo común", con el objetivo de "contribuir a su mantenimiento y difusión, garantizando así la pervivencia de nuestras costumbres".

Unas costumbres que, en el caso de Bernardos, se remontan a finales del siglo XVIII o principios del XIX y que, desde el año 1940, se venía celebrando una vez cada década, en los años que terminan en cero. Una costumbre que, en 2020, a causa de la pandemia, Bernardos había tenido que aplazar hasta el día de hoy, en el que, con este acto, quedaban preludiadas unas fiestas que se desarrollarán desde mañana, 3 de junio, hasta el próximo miércoles 8. Por ello, Miguel Ángel de Vicente, augurando que la fiesta estaría a la altura de la espera, concluía que "estos dos años que han transcurrido, desde que aprobamos la declaración en el Pleno hasta el día en que hoy podemos hacer entrega de esta distinción, han demostrado que el tiempo sólo deteriora aquello que se descuida. Y que, por el contrario, aquello a lo que se presta atención, aquello que se protege, gana valor y merece reconocimiento".

Pese a que las tradiciones de los desplazamientos de imágenes religiosas en la provincia son comunes, la Subida de la Virgen del Castillo de Bernardos es particular desde que a mediados del siglo XX quedara establecido celebrarla tan sólo en los años que acaban en cero.

La tradición habla de una serie de apariciones y desapariciones de la Virgen, identificada con una imagen de la virgen de los Remedios, según las investigaciones de Ildefonso Llorente y Rufino Núñez. En el programa de las fiestas de la localidad conviven actos litúrgicos religiosos y actividades populares, destacando el recorrido de la Virgen por las calles y la plaza del pueblo, flanqueada a su paso por seis arcos adornados con más de cuarenta y dos mil flores en total. Durante 'La Subida' se suceden la música y los bailes, entre sonidos de dulzainas, jotas procesionales, castillos y danzas de paloteo interpretadas por hombres y mujeres jóvenes.