El tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha confirmado una sentencia de la Audiencia Provincial de Segovia en la que se había impuesto a un condenado como autor responsable de un delito de lesiones y otro de obstrucción a la justicia ya definidos, a las penas de un año y tres meses de prisión por el delito de lesiones; un año y seis meses de prisión, y multa de nueve meses con cuota de seis euros, por el delito de obstrucción a la justicia; costas; y a que indemnice a un lesionado en la cantidad de 1.980 euros.

Según la sentencia, la Audiencia Provincial había considerado que,  de la prueba practicada en el acto del juicio oral, resultó probado que,  sobre las 00,20 horas del día 25 de octubre de 2020, el acusado, de nacionalidad búlgara,  se dirigió en unión de otros dos individuos que no han sido identificados al domicilio de otro hombre, en Cuéllar.  Una vez que el acusado llegó al lugar, llamó al portero automático de la vivienda de éste,  manifestándole que quería hablar con él en relación a una denuncia que había interpuesto contra el padre del acusado; accediendo a su solicitud y bajando a la calle, momento en que el acusado, sin mediar palabra, le agredió propinándole golpes en la cara y en la cabeza, logrando éste zafarse de los agresores y refugiarse en su domicilio, saliendo posteriormente por otra puerta del portal y dirigiéndose al domicilio de su pareja, en Bahabón.

Sobre las 01, 20 horas, el agredido recibió una llamada telefónica del condenado en la que le manifestó, con la intención de infundirle temor, "que le iba a echar de Cuéllar y que si no quitaba la denuncia le iba a matar a él y a su pareja". El acusado pretendía con ello doblegar la voluntad del primero con el objeto de que éste retirara la denuncia que había formulado contra su padre,  el día 2 de agosto de 2020, en el Cuartel de la Guardia Civil de Cuéllar.

Como consecuencia de los hechos anteriores, el agredido sufrió lesiones consistentes en dolor craneal a nivel occipital, dolor a nivel periorbitario, dolor a nivel del codo izquierdo, pérdida de los dos incisivos superiores, movilización del canino superior izquierdo y visión borrosa en el ojo izquierdo, que precisaron una primera asistencia facultativa y seguimiento por atención primaria, lesiones que tardaron en curar siete días que fueron de perjuicio básico, y quedándole secuelas por pérdida completa traumática de dos incisivos o caninos.