El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, pondrá sobre la mesa durante la reunión del próximo lunes del Consejo de Política Fiscal y Financiera las reivindicaciones de Castilla y León de un nuevo fondo no reembolsable para afrontar los gastos de la covid en 2021; su rechazo a una merma de los ingresos a cuenta que reciba la autonomía; y criterios objetivos para el reparto de las ayudas de la UE. Fernández Carriedo explicó a Ical, que aunque el orden del día previsto para el encuentro que anunció hoy el Gobierno, es «meramente informativo» sobre la evolución del déficit, deuda y pacto de estabilidad, la Comunidad, aprovechará la oportunidad de trasladar sus demandas. 

El consejero afirmó que con esos datos, Castilla y León tendría la base para cerrar sus cuentas, en las que trabaja desde que en julio se publicó la orden de elaboración de los presupuestos, con la presentación de las demandas de gasto por parte de las consejerías. Precisamente ayer se conoció que el Ministerio de Hacienda eliminaba las reglas fiscales para este año y el próximo, lo que supone que la Comunidad no tendrá que verse sujeta al techo de gasto y los objetivos de déficit y deuda pública, varios de los datos que la Consejería de Economía reclamaba para poder elaborar los presupuestos autonómicos. 

«Esos datos nos permitirían trabajar, ya que para el ajuste fino de las cuentas necesitamos conocer el nivel de ingresos», dijo, para recordar que «a día de hoy» ninguna autonomía lo ha hecho porque «nadie está en condiciones». Aseguró así que para la presentación de las cuentas de la Comunidad, podrían esperar a conocer en detalle el presupuesto del Estado.

Carlos Fernández Carriedo asumió que el retraso en la convocatoria del encuentro prevista para septiembre, no es»muy grande», pero dejó claro que lo importante es que su celebración «sea útil en las cuestiones que la Comunidad tiene planteadas». El consejero defendió el nuevo fondo no reembolsable para 2021 con los mismo ingresos o más que en 2020, porque es «lógico» ya que se mantiene el mismo factor de gasto, la covid, que impulsó el de este ejercicio.

Fernández Carriedo constató que el gasto por la pandemia será muy importante en sanidad para asistencia así como si sale una vacuna; junto a los servicios sociales, y las medidas de apoyo a la economía y al empleo, junto a la educación y el trasporte, donde será muy relevante.

Carriedo también advirtió de que las entregas a cuenta no deben caer respecto a 2020, porque «si ya ha sido complicado este año, no tendría sentido su merma» en un nuevo ejercicio marcado por la pandemia.

Por último, exigió criterios objetivos para un reparto «justo y equilibrado» de los fondos que llegarán de Europa para la transformación del modelo productivo. En este sentido, anunció que la oficina de coordinación creada en esta materia, se reunirá el lunes que viene para elaborar un documento con las materias que consideran que pueden ser financiables, que remitirán al Gobierno esa semana para que las defienda ante Europa. En este sentido, aclaró