El pleno del Ayuntamiento de Segovia ha aprobado este viernes con los votos a favor del PSOE, Unidas Podemos e IU y la abstención de PP y Ciudadanos, el plan de gestión directa de la Estación de Autobuses, último trámite para su aplicación, cinco años después de que se tomara la decisión de no volver a sacarla a concurso, tras expirar la última etapa de gestión directa en 2014. A partir de ahora, el Ayuntamiento gestionará de manera formalizada el tráfico de la Estación, así como sus espacios públicos y los locales. De momento, se iniciarán los procedimientos oportunos para que la totalidad de los locales salgan a licitación pública. No obstante, aquellos que están ocupados cuentan ya una autorización temporal de uso, que será prorrogada mientas no se adjudiquen los locales.

La concejalía de Tráfico, Transporte y Movilidad trasladará sus oficinas a la Estación de Autobuses. El Ayuntamiento contará con una dependencia municipal "más cercana a la ciudad y más accesible a los ciudadanos", explicaron fuentes municipales en un comunicado. Igualmente, se adecuará uno de los locales como área de descanso y vestuario para las tripulaciones, y cuatro de ellos se destinarán a taquillas para la venta de billetes.

En la actualidad la Estación de Autobuses de Segovia tiene la consideración de estación de transporte por carretera, destinada a concentrar las salidas, llegadas y tránsitos de los vehículos de transporte público que discurren por el término municipal de Segovia.

Presta servicio tanto a transportes públicos regulares permanentes como temporales de viajeros de uso general. Los operadores de servicio discrecional pueden solicitar el acceso a las instalaciones para la recogida o bajada de pasajeros que debe autorizar el Ayuntamiento. Cuenta con 13 dársenas o andenes cubiertos y accesos independientes para vehículos y viajeros.

La estación de autobuses de Segovia (paseo Ezequiel González 20) se inauguró el 15 de mayo de 1978. Desde entonces se han alternado los modos de gestión directa e indirecta. En la década de los 80 y hasta el 2005 se gestionó de manera directa. A partir de esa fecha se adjudicó a una empresa hasta el 2014, momento en el que el Consistorio volvió a asumir la gestión de la infraestructura.

Tras un proceso de reforma general de la estación de autobuses, obras cofinanciadas por la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de la capital, en mayo de 2017 la alcaldesa, Clara Luquero, solicitó a la Consejería competente en materia de transporte la autorización para que sea declarada estación de transporte de viajeros, autorización recibida en junio de ese año. Desde entonces se han ido realizando intervenciones para la mejora, por ejemplo, de los aseos públicos de esta infraestructura municipal, construyendo un baño adicional para personas con movilidad reducida e incorporando cambiadores de bebés en los aseos de ambos sexos. Y aunque seguirán realizándose obras de manera puntual, será bajo una gestión municipal ya normalizada.