Que la avenida del Padre Claret vuelva a estar en obras desde el lunes pasado es más que un déjà vu por muchos motivos. Ahora los trabajos se centran en el tramo inferior, entre Soldado Español y la plaza de la Artillería, donde se prevé cambiar el adoquín rugoso actual por uno prefabricado de hormigón, así como la capa que lo sustenta; antes se modificará la red de drenaje y también se sacarán rejillas de ventilación de la calzada, al considerarse que son parte del problema de los baches recurrentes: no soportan el paso constante de coches y autobuses, y los adoquines que las rodean se acaban descolocando.

El corte de tráfico, que también afecta al tramo superior (sólo se puede acceder para ir a garajes privados o al parking de uso público) y vuelve a sobrecargar San Gabriel por el desvío, se prolongará tanto como tarde en ejecutarse el proyecto: cuatro meses, en principio. Es el doble de lo que hizo falta para cambiar adoquín por asfalto entre la glorieta de Dionisio Duque y Soldado Español entre febrero y abril de 2019, y bastante más que en cualquiera de las numerosas intervenciones acometidas allí desde que se inauguró el aparcamiento subterráneo en junio de 2009 con una remodelación de su superficie indiscutiblemente defectuosa. Desde entonces se han producido reparaciones de un día y también de varias semanas o más de un mes, con cortes parciales en unos casos y totales en otros, y a menudo por baches que se eliminan y vuelven a aparecer en los mismos puntos. El Ayuntamiento de Segovia no parece llevar la cuenta del número de intervenciones, o al menos no ha dado respuesta (al cierre de esta edición) a la pregunta que le lanzaba El Día al respecto el pasado 14 de octubre, pero un repaso a la hemeroteca de prensa revela que ya van más de una quincena. 

El coste global acumulado por todos estos arreglos, que tampoco ha sido concretado por la fuente oficial, cuenta además con el agravante de que la adjudicataria de la construcción y explotación del parking, Isolux-Corsan, dejó de cargar con el mantenimiento de la avenida desde el 1 de enero de 2017. En 2016 ya había solicitado negociar un reequilibrio económico de la explotación y el Ayuntamiento terminó aceptando un acuerdo cifrado en algo más de tres millones de euros en favor de la empresa, pero pagados en especie, al dejar de ingresar un canon anual de 60.000 euros, derivar a las arcas públicas el coste de cualquier reparación a partir de entonces y ampliar en tres años y medio el contrato de gestión del parking, hasta octubre de 2045.

La calle San Gabriel soporta ahora el tráfico derivado del corte de Padre Claret. - Foto: Rosa Blanco

Cierto que la intervención iniciada en los últimos días merecerá la pena más que ninguna otra anterior si, tal y como se pretende, se consigue que sea duradera. Aunque, en la práctica, la obra realizada en el tramo superior en 2019, valorada en algo más de 90.000 euros, también lo iba a ser y ya hubo que actuar tres veces por un bache rebelde, ahondando en un lamentable estado general de esta vía que salta a la vista de cualquiera, y sobre todo al 'tacto' del tráfico, desde hace demasiado tiempo.

De hecho, el proyecto que se ejecuta ahora lleva redactado desde el mandato 2015-2019, aunque entonces se dejó en un cajón al no habilitarse ninguna partida del presupuesto para ejecutarlo, dando prioridad a otros; y este año tuvo que salir además a concurso por segunda vez. Se adjudicó en julio a la empresa Fuenco por 217.746,68 euros, un 46,88% más (69.504,07 euros extra) que en mayo de 2021, cuando se contrató por 148.241,61 a otra empresa, MAVA 2000, que no llegó a iniciar los trabajos por falta de suministro del tipo de adoquín previsto (uno prefabricado de 12 centímetros de espesor), según se apuntó en agosto y septiembre de 2021, ya con la crisis de materias primas encima. La adjudicataria sugirió entonces otro adoquín, pero el Ayuntamiento lo descartó y, pasados más de seis meses de dudas y trámites, en marzo de 2022 se formalizaba el acuerdo de rescisión del contrato para proceder a un nuevo concurso con modificado de proyecto incluido; entre otras cuestiones, para cambiar el adoquín de 12 centímetros por otro de 10. 

EL ORIGEN DEL PROBLEMA. ¿Pero a qué se deben tantas obras en tan poco tiempo? Resumido en cristiano, puede decirse que la reforma inicial que se terminó en 2009 estuvo mal planteada; se hizo con idea de que no tuviera que soportar tanto tráfico (por planes de restricción del paso de vehículos al casco histórico y medidas asociadas) y desde entonces no se han hecho más que parches, obras de urgencia o arreglos provisionales, con la excepción de la reforma integral de 2019 en el tramo alto, y a la espera de la actual en el tramo bajo. 

Por otro lado, una respuesta más técnica la aporta la propia documentación del proyecto que se está ejecutando ahora, donde se alude a los «numerosos hundimientos o blandones» de estos últimos 13 años que, «en principio», se atribuyen a «la irregularidad del espesor del adoquín existente», que oscila de 4 a 8 centímetros, frente a los 10 previstos para el nuevo. Además, también se apuntan a los «distintos espesores de la capa asiento de mortero», de entre 8 y 12 centímetros. Un grosor desigual que se tacha de «excesivo», hasta el punto de que ahora se proyecta que esa capa sea de 4 centímetros. Y luego están también los problemas ya citados que han generado las rejillas de ventilación. No en vano, éstas ya fueron objeto de diversas reparaciones a partir de julio de 2010, trece meses después de que se inaugurarse el parking. 

Ya en 2016, Isolux-Corsan, que acababa de cursar la solicitud de reequilibrio económico, asumió arreglos en tres ocasiones (marzo, abril y julio) por distintos puntos a lo largo de toda la avenida, pero eso no impidió que el Ayuntamiento tuviera que abordar nuevas intervenciones por baches y demás en diciembre de 2017, mayo de 2018, febrero de 2019, agosto de 2020, enero de 2021... Incluso en marzo de 2022 por un bache arreglado dos veces el año anterior. Y ahora, con los dedos cruzados para que la obra en curso ponga fin a este bucle de remiendos.

CRONOLOGÍA DE OBRAS, PARCHES Y REMIENDOS EN PADRE CLARET

29 DE JUNIO DE 2009: Inauguración del parking. Las obras arrancaron en abril de 2007 y se retrasaron más de seis meses. La inversión global, 17,4 millones.

AGOSTO DE 2009: El Ayuntamiento ordena a la adjudicataria del parking, Isolux-Corsan, que rebaje la pendiente de la rampa de un paso de peatones que pega en los bajos de los vehículos. La obra, con corte parcial de tráfico, duró una semana.

JULIO DE 2010: Obras de reparación de las rejillas de ventilación del aparcamiento subterráneo y de la pavimentación de uno de los pasos de peatones. Fue necesario cortar por completo el tráfico del lunes 5 al domingo 11 de julio.

AGOSTO DE 2011: Nuevas reparaciones en el sistema de ventilación del aparcamiento, y otra vez con corte total de tráfico por afectar a la superficie, es decir la calzada, entre el 9 de agosto y el 5 de septiembre de 2011.

JULIO DE 2013: Ya surgen quejas e Isolux, a demanda del Consistorio, acepta reparar blandones, sumideros, arquetas y pozos de registro, así como eliminar varios reductores de velocidad. El corte al tráfico duró mes y medio.

ENERO DE 2014: Hubo que reparar tres rejillas (una de ventilación y dos sumideros para la lluvia) y recolocar los adoquines que las rodeaban por el deterioro causado por el tráfico. Una semana de corte parcial.

MARZO DE 2016: Esta vez fue una obra que sólo afectó al tráfico el 15 de marzo para ejecutar obras de sujeción de dos pozos ubicados en la calzada, y sólo se cortó el carril de subida desde la plaza de la Artillería.

ABRIL DE 2016: La empresa, otra vez a demanda del Consistorio, repara baches, recoloca adoquines y repasa las tapas de registro entre la glorieta de Dionisio Duque y Soldado Español.Tres semanas de corte total.

JULIO DE 2016: Isolux aborda una ronda de reparaciones similar a la de abril, pero como una segunda fase ya acordada entonces con el Consistorio, centrada en el tramo de Soldado Español a Artillería. Fueron otras tres semanas.

DICIEMBRE DE 2017: El Ayuntamiento asume el mantenimiento de Padre Claret desde ese año, deja de cobrar un canon anual de 60.000 euros a Isolux y repara un hundimiento en el tramo alto. Una semana de corte parcial.

MAYO DE 2018: Nuevo corte parcial de tráfico que se prolongó durante once días para que el Ayuntamiento pudiera reparar baches existentes en el tramo que va de la glorieta de Dionisio Duque y la calle Soldado Español.

FEBRERO DE 2019: El Ayuntamiento asume la obra más costosa hecha hasta la fecha en el tramo alto, con más de 90.000 euros para cambiar adoquín por asfalto. Tocó asumir un corte total y la obra se prolongó dos meses.

AGOSTO DE 2020: Reparación de hundimientos en el tramo bajo por 20.500 euros y 15 días de plazo. Se asume como una obra «de urgencia» a la espera del «proyecto definitivo», ya redactado pero sin dinero para poder ejecutarlo.

ENERO DE 2021: Nueva reparación de un hundimiento en el tramo superior a pesar de la reforma de 2019, por lo que su coste es asumido por la empresa  que se contrató para la ejecución de aquel proyecto.Una semana.

MARZO DE 2022: Reparación de un bache en el tramo de la glorieta de Dionisio Duque que sólo requiere una jornada de trabajo, pero que se aborda por tercera vez en menos de un año, según denunciaba el grupo municipal Ciudadanos.