"Avisé al partido de que no me presentaría a más elecciones"

D. A.
-

Luquero recalca que la propuesta de Clara Martín como sucesora es suya, pero el PSOE «está de acuerdo» · «Es un relevo generacional, los concejales más jóvenes debemos asumir la responsabilidad», opina la elegida

Clara Luquero y Clara Martín toman un refresco en una terraza de la plaza de SanLorenzo. - Foto: Rosa Blanco

Clara Luquero y Clara Martín, alcaldesa de Segovia y sucesora, se citan con El Día, el miércoles a las 11 de la mañana en la plaza de SanLorenzo, para compartir una pausa, refresco y reflexión en medio de una semana especialmente intensa para ambas. La primera tras el anuncio del 6 de mayo sobre el traspaso de poderes.

Luquero hará efectiva su dimisión, «por motivos personales y familiares», en el pleno ordinario del viernes 27 de mayo; yMartín tomará el bastón de mando en uno extraordinario que se baraja celebrar el 4 de junio, sesión en la que la primera entregará su acta de concejal y dejará la política. El nuevo edil (Javier Serrano es el siguiente en la candidatura socialista, pero no se ha desvelado si acepta) entrará al Ayuntamiento en el siguiente pleno (1 u 8 de julio), y poco antes se prevé anunciar la reorganización que conlleva. Pero antes de todo eso, la pausa para comentar con las protagonistas cómo se ha ido gestando todo.

La propuesta del lugar de la cita viene de parte de ambas. «Es una de las plazas más especiales de Segovia, la frecuentamos a menudo y alguna vez para tomar un café o un refresco, aunque oportunidades para eso igual tengo una cada veintitantos días», afirma Luquero. «Yo estudié en la SEK, así que venía mucho por aquí, y luego San Lorenzo está vinculado a todo el valle del Eresma, que es la zona de la ciudad que más paseo», añade Martín. 

Por la plaza pasa un técnico municipal recientemente jubilado que se para a saludar. «Qué bien os veo», les dice. «Ahí estamos, yo en las puertas de la jubilación y Clara (Martín), que ya estaba metida hasta aquí desde que llegó (dice marcándose la frente), a punto de meterse del todo», le responde. «Son 19 años ya (11 de concejala y 8 de alcaldesa), mi familia está feliz, he hecho lo que tenía que hacer y ahora, a otra cosa».

De vuelta a la conversación con El Día, Luquero destaca de Martín que «tiene agallas de sobra, muchísima capacidad de trabajo y una cabeza estupenda» para tomar el bastón de mando. «Me voy súper tranquila. Sabía que iba a ser buena cuando la fiché porque me dejó deslumbrada desde el primer día, pero ha superado mis expectativas».

La actual alcaldesa cuenta que «fichó» a Martín para su candidatura tres años antes de las elecciones de 2019. «La vi dando una ponencia sobre el Acueducto en el Archivo Provincial y me encantó la solvencia con que hablaba. Me dije a mí misma: esta mujer podría funcionar muy bien en política». Ya la conocía de antes porque, al ser arqueóloga, trabajaba en el ámbito del patrimonio histórico de la ciudad, pero fue tras aquella ponencia cuando dice que pensó en ella como concejala, aunque no le planteó nada hasta finales de 2018, «cuando faltaban unos siete meses para elecciones», matiza.

Quedaron en una cafetería próxima a la Plaza Mayor: «Yo la quería para llevar Patrimonio Histórico y también estaba buscando un perfil para Urbanismo, pero de repente, reflexionando, caí en que ella estaba en el equipo de trabajo de redacción del Peahis (PlanEspecial de Áreas Históricas), con lo cual ya estaba metida hasta la médula en urbanismo». 

«Sí, recuerdo que te pregunté qué perfil estabas buscando para esa área porque entendía que Patrimonio Histórico y Urbanismo debían tener una relación muy estrecha», prosigue Martín. Pasados «diez o quince días», volvieron a quedar en el mismo sitio y Luquero recibió el sí. «Recuerdo que me dijo: voy a asumir el reto porque soy joven y no quiero que dentro de unos años me pregunte a mí misma por qué no me atreví a afrontarlo por mi ciudad». 

Luquero quería entonces a Martín como concejala aunque, en paralelo, asegura que ya estaba pensando en la retirada. «Yo ya había comunicado a mi partido, bastante antes de las últimas elecciones, que esas serían las últimas, para que fueran preparando el futuro». Tiempo después, según avanzó el mandato: «Cuando veo cómo están trabajando los concejales empiezo a pensar que ahí (enMartín) hay unas expectativas de futuro muy claras, pero la decisión final no me correspondía sólo a mí. La de mi dimisión sí, que esa es sólo mía, pero el relevo se debía trabajar con el partido». 

A menos que seas Pedro Arahuetes, podría decirse, ya que éste era independiente (no estaba afiliado al PSOE), su relación con los dirigentes segovianos del partido no era la mejory él mismo cuenta que en 2014 se limitó a comunicar su apuesta por Luquero. «Será como será, pero ha sido un alcalde fuera de serie que se dejó la piel durante más años que yo (11) y transformó la ciudad como ningún otro», señala la actual regidora. ¿Pero lo sigue considerando entonces el mejor que ha tenido Segovia, igual que decía al inicio de su etapa? «Sin ninguna duda», responde a pesar de las diferencias de los últimos años. ¿Mejor que Luquero? «Yo no me tengo que juzgar nunca. Lo que sí me voy con la conciencia tranquila en el sentido de que he hecho todo lo que he podido, que es menos de lo que habría querido».

Siguiendo con su relato sobre la sucesión, Luquero cuenta que la primera persona con la que habló de la opción de Martín fue Jesús García Zamora. «Hemos trabajado todo esto en tándem, ha sido mi mano derecha durante todo este tiempo y los dos lo vimos clarísimo, pero yo no puedo irme y decir 'me tiene que sustituir tal persona'», insiste. «El partido me pregunta, yo le digo que la persona que veo súper capacitada es ésta (Martín), el secretario local (JoséBayón) y el provincial (José Luis Aceves) dicen que piensan igual, y a partir de ahí les contamos a los compañeros del equipo, que también han estado de acuerdo en que era el perfil adecuado», sostiene.Entre otros motivos, «porque en estos tres años ella ya ha llevado medio Ayuntamiento», dado que «los principales proyectos estratégicos de la ciudad son de sus áreas». Desde el Peahis hasta el desarrollo urbanístico de Prado del Hoyo, pasando por el plan de implantación de la zona de bajas emisiones, que supondrá ampliar el área de tráfico restringido en el recinto amurallado.

«HONOR Y PAPELETA». La confirmación de la inminente dimisión de Luquero y su propuesta de sucesión dice que se la trasladó a Martín sólo «unos días antes» de hacerla pública el 7 de mayo. «Se emocionó mucho y se puso a llorar», destaca. Y Martín valora que para ella es «un honor», ¿pero también un marrón, en vistas de la coyuntura política, con PP y Vox al alza y un pronóstico nada halagüeño para la izquierda de cara a las elecciones de mayo de 2023? «En primer lugar, que se decida que tú eres la elegida para representar a tu ciudad, y trabajar en cuerpo y alma por ella, es el mayor orgullo que puedes tener cuando trabajas en el ámbito de la política local», contesta Martín. «Luego evidentemente asumes una responsabilidad infinita, pero esta tanda de concejales más jóvenes que hemos entrado en el Ayuntamiento, la 'hornada' que tú dices (señala a Luquero), que ya nacimos en democracia, con una situación social y laboral más o menos estable y un estado de derecho pleno, somos los que tenemos que tener la responsabilidad de seguir defendiendo esos valores que recibimos en herencia de las generaciones que lucharon por ellos a partir de los 60 y 70». 

«Tiene 40 años, es como mi hija», advierte Luquero. «Un cambio de generación», remata Martín. 

La sucesora para el año que resta de mandato tiene también en su mano ser la candidata en mayo de 2023 porque, por reglamento interno del PSOE, quien es alcalde puede decidir si es también cabeza de lista en el siguiente proceso electoral sin celebrar primarias, salvo excepciones muy concretas y complejas, como que un número muy alto de afiliados las pidan. Otra cuestión es que nunca sería candidata si no fuera con el aval del partido, ¿y ve Luquero a su sucesora como alcaldesa más allá de 2023? «Sí, sin ninguna duda», contesta. «La veo, y además creo que es lo mejor que le puede pasar a Segovia desde el punto de vista político, será mejor que yo». Claro que entonces la decisión de quién gobierna no será de la actual alcaldesa o su partido, sino de los ciudadanos.