El Club Deportivo Claret volvió a exhibir músculo con motivo de la presentación de sus equipos, que convirtió de nuevo el pabellón del colegio en una gran fiesta. En vísperas de la Navidad, los miembros que componen esta extraordinaria marea verde recibieron el primer regalo en forma de aplauso de las decenas de padres que no se quisieron perder el desfile de sus hijos.

Una ceremonia que año a año dura un poco más aunque no por falta de habilidad de la organización sino porque este club segoviano no cesa de aumentar su número de integrantes. Esta temporada supera ya el medio millar –un centenar más que el curso precedente– de la mano de 24 equipos de fútbol sala y fútbol y otros tantos de baloncesto. Desde niños que empiecen el cole a adultos.

No todos estudian en el Claret. De hecho, el número de ‘foráneos’ alcanza ya cerca del diez por ciento respecto al total de componentes de la entidad. «Y hace poco eran sólo el dos por ciento», recuerda el directivo Juan Carlos Lázaro, una de las personas al frente de una estructura que ha alcanzado una envergadura casi profesional. En la sección de baloncesto cuentan con varios equipos que militan en categorías autonómicas, coronados por la plantilla de Primera Nacional masculina. Esta, por segundo campaña consecutiva, se ha convertido en la principal referencia del baloncesto segoviano. El reto para sus jugadores ahora es dar el salto definitivo para –quizás– pelear pronto por el ascenso.

Como hicieron los cadetes la temporada en fútbol, donde de momento todos los equipos juegan en competiciones provinciales. Y lo hacen bajo unas señas de identidad que dan prioridad a la educación a través del deporte. «Lo más importante es que los chavales se diviertan y que nunca se produzcan episodios de violencia», indica Lázaro, que ayuda a coordinar un ‘ejército’ de más de medio centenar de monitores.

También este se ha incrementado dentro de esta espectacular explosión verde a la que no se ve el final, aunque sus directivos advierten de que esa expansión no se llevará a cabo a cualquier precio. «El objetivo es seguir ofreciendo un buen servicio a padres y niños», concluyen.