Esta semana saldremos de dudas. ¿O no?, que diría Rajoy. El jueves 10 de marzo se constituirán las nuevas Cortes de Castilla y León. Los 81 procuradores elegidos el 13-F tomarán posesión de sus escaños y se convertirán en protagonistas de una sesión histórica (ya salió la palabreja), aunque, realmente, los ojos y los oídos estarán puestos en los jefes de fila. Y como es posible que no hagan declaraciones relevantes hasta entonces, en sus gestos, en su manera de hacer el paseíllo. ¿Adivinaremos por las sonrisas profidén de Mañueco que ya hay acuerdo, el que sea?, ¿sabrán disimular los de Vox su probable entrada en el gobierno y los cargos adjudicados?, ¿qué podremos deducir de los semblantes de los tres numantinos de Soria ¡Ya!? Cito a estos electos porque parece que todo (o casi) va a girar en torno a ellos. Don Alfonso ya ha descartado a los demás por lo que no se esperan sorpresas. Veremos cuál es la reacción de PSOE, UPL, Cs, Podemos y Por Ávila cuando se pongan sobre la mesa nombres, exigencias y programas. ¡Ay, los programas! Todos aseguran por activa, pasiva y perifrástica que solo pactarán si se respeta y se cumple su programa, pero, claro, lo hemos oído tantas veces y lo hemos visto incumplido tantas y tantas que es difícil creer que en esta ocasión sí irá para adelante esta premisa. Más bien la pelea se dará en otro campo, en el del reparto del Poder. Y ahí también abundan los interrogantes…especialmente para el futuro de esta tierra. ¿Qué nos espera a los castellano-leoneses si Mañueco gobierna en minoría y sometido a los caprichos de VOX y a ocurrencias como derogar esta norma, aquella y la otra?, ¿dónde buscará el PP los votos que le harán falta para aprobar los presupuestos y otras leyes?, ¿recurrirá a las abstenciones de los grupos con los que ahora se niega a sentarse?, ¿será verdad que tiene plena autonomía para pactar con quien quiera sin consultar con Núñez Feijóo, gran salvador y ya líder de la derecha moderada española? Se aproximan días intensos. Claro que quizás ya esté todo rustrido y lo del jueves sea solo un paripé; eso sí democrático. Veremos.