La concejala de Seguridad, Raquel de Frutos, y el intendente-jefe de la Policía Local, Julio Rodríguez Fuentetaja, han mantenido una reunión con representantes de la AMPA y de la dirección del colegio Fray Juan de la Cruz para analizar los problemas de seguridad que habían denunciado. A partir de ahora, el acceso de vehículos a la plaza de Colmenares estará cortado durante las horas de entrada y salida de los alumnos con el objetivo de evitar el estacionamiento irregular.

Según ha anunciado el Ayuntamiento, la Policía local vigilará la zona y regulará la circulación por la calle Taray, donde controlará que se haga un buen uso de las plazas de aparcamiento para discapacitados, ya que además el CEIP Fray Juan de la Cruz es un centro para escolares con diversidad funcional. A través de una nota de prensa, el Consistorio ha señalado también que la AMPA y la dirección del centro se han comprometido a informar a los padres y madres de alumnos de estas medidas y a pedir su colaboración para que resulten eficaces.

El Ayuntamiento y el propio centro se hará un seguimiento del resultado de las medidas para valorar su efectividad y si es necesario introducir algún cambio. "Ambas partes, Concejalía de Seguridad y centro escolar, estarán en contacto permanente porque todos coinciden en que es necesario revertir una situación que había levantado cierta preocupación entre la comunidad escolar", concluye la nota de prensa.