Diego Izco

TIEMPO MUERTO

Diego Izco

Periodista especializado en información deportiva


Un ERTE

23/03/2020

Si no somos nosotros mismos, tenemos a menos de dos grados de separación a al menos una persona que ha sufrido o va a sufrir una regulación más o menos dura y traumática en su trabajo. Si todo se detiene (¿Todo se detiene? ¡Todo se detiene! Incluso ustedes, los que colapsaron las salidas de Madrid, Valencia, Barcelona o Bilbao en el comienzo del puente) y las ayudas son solo eso, ayudas pero no remedios... Digo, que si todo se detiene también el trabajo, la producción, los ingresos y los sueldos. Y tocará remangarse y remar. Y buscar la salida ahí al fondo.

Y en ésas, se lo crean o no, también están instituciones que ingresan decenas y decenas de millones de euros cada año. Y no, no hablo de Inditex -que ya habrá otras páginas y temáticas para hablar del tema- sino de los clubes de elite de fútbol. Los intocables, los multimillonarios y gigantescos y descomunales clubes de primerísimo primer nivel… haciendo cuentas porque no ven cómo llegar a final de temporada. Porque al contrario que el 'imperio Ortega', un Barça o un Madrid no viven de vender camisetas (no exclusivamente) y trazan sus presupuestos al día, de tal forma que raro es el curso del que salen con pingües beneficios o notables pérdidas: salvo catástrofe en Champions, suele ser lo comido por lo servido, por emplear términos macroeconómicos del español medio.

Pues bien, ahora hay reuniones (videoconferencias, se supone) entre gigantes del fútbol europeo en las que se habla de «o se rebajan el sueldo un 30% o no llegamos», y se avecina una tormenta entre clubes y representantes, entre abogados y lo que todos tienen ahí colgado: un contrato vinculante para ambas partes que no contemplaba la irrupción de un coronavirus. A ver si al final vamos a tener que pagarle entre todos el sueldo a Gareth Bale…