Rafael Monje

DE SIETE EN SIETE

Rafael Monje

Periodista


La integridad personal, el mejor título

27/11/2019

Desconozco si será la influencia del poder público, el afán de protagonismo, el anhelo de notoriedad pública, el deseo de aparentar lo que no se es o no se tiene, o quizá todo a la vez, lo que propicia que un dirigente político opte por expresar en sus credenciales educativas que se está en posesión de un título universitario cuando no lo está. Lo sucedido estos días con José Miguel González, exdiputado del PP por la provincia de León y exsecretario provincial de ese partido tras haber presentado el pasado domingo su dimisión por haber acreditado un título falso como licenciado en Derecho, no tiene un pase, se mire por donde se mire. ¿Qué necesidad aflora en una persona expuesta al estricto escrutinio público para falsear un título universitario? ¿Para ejercer de diputado por una provincia es imprescindible un título de educación superior? Claramente no, en relación a esta última cuestión. Habría, por tanto, que rebuscar en lo inaudito que puede ser el comportamiento del ser humano y que, en el caso del referido político, raya lo exasperante por la infantil osadía de querer ser lo que, a todas luces, no se puede ser porque, sencillamente, no existe (el título, obvio).

Ante hechos así, cabe hacer siempre una profunda reflexión sobre la importancia de la normalidad, que es lo que configura realmente la actitud personal y una forma de estar y de relacionarnos ante los demás. Esa y no otra cosa es la que nos hace grandes, la que refleja la evidencia de la calidad humana y, créanme, la cualidad que otorga como ninguna otra la auténtica talla intelectual de una persona.

No creo en absoluto que un título académico, sea el que sea, eleve la capacidad de una persona para afrontar mejor un cargo público o una responsabilidad orgánica en una formación política. De ahí esa apelación a la normalidad como un antídoto del disparate y la soberbia. No hay ningún título universitario que supere la mejor de las formaciones: la integridad personal.