El tráfico de mercancías por las carreteras de Castilla y León afronta una "larga travesía en el desierto" en 2021, tras el rebote del tercer trimestre de este año, coincidiendo con la tregua este verano de la covid-19. El tráfico se disparó un 9,44 por ciento en la Comunidad, hasta superar los 41,5 millones de toneladas, una cifra que no se alcanzaba desde 2010 y 2011, al inicio de la anterior crisis económica. 

Entre julio y septiembre, el movimiento de mercancías en Castilla y León volvió a crecer, especialmente en los tránsitos entre municipios y en los itinerarios hacia otras autonomías, mientras los flujos internacionales disminuyeron notablemente, con una caída del 25 por ciento, de acuerdo a los últimos datos disponibles del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. 

De hecho, el sector movió en la Comunidad más de 41,5 millones de toneladas por las carreteras, frente a los casi 38 del pasado año, cuando todavía no había irrumpido en España la pandemia. Además es una de las cifras más elevadas de los últimos nueve años, pues solo se asemeja a la de 2011, cuando fueron algo más de 42 millones de toneladas.

Por tanto, de julio a septiembre, el sector vivió un ‘espejismo’ en la carga de trabajo, especialmente en el mercado nacional. Si en 2019 fueron casi 38 millones de toneladas las registradas, en 2018 se contabilizaron unos 36 millones de toneladas; en 2017, 38; en 2016, 37, y en 2015, 38,3; en 2014, 36 y en 2013 y 2012, el mínimo de 31 millones de toneladas.

Sin embargo, los nueve primeros meses del año siguen mostrando un retroceso importante de actividad del transporte de mercancías. De hecho, el tráfico fue un 7,57 por ciento menos que entre enero y septiembre de 2019, no obstante, la caída que supuso el confinamiento de primavera comienza compensarse, puesto que la caída en los últimos 12 meses es inferior, aunque todavía elevada porque se sitúa en el seis por ciento, según informa Ical. 

Ahora, los transportistas se enfrentan a la recta final del año, el último trimestre, un periodo en el que la segunda ola del COVID impuso restricciones en la actividad de la hostelería y los centros comerciales, así como en la movilidad no esencial. Todo ello, ya está pasando factura, pese a que la Comunidad vive en estas semanas uno de los periodos de mayor número de compras, por la cercanía de la Navidad. 

Incertidumbre: Brexit y covid

El palentino Óscar Baños, portavoz de la Federación de Empresas de Transporte de Mercancías por Carretera de Castilla y León (Fetracal), reconoció que el sector se enfrenta a una gran incertidumbre en la recta final de este año, debido a la situación generada por el COVID-19, sobre el que ya se anuncia una tercera ola, y el desenlace del Brexit y sus consecuencias. 

“Nos queda una travesía larga por el desierto”, sentenció Óscar Baños, quien apuntó que a corto plazo prevén “más nubarrones que claros”. Destacó que las cosas han mejorado desde la primavera, pero recalcó que no han conseguido recuperar el volumen de trabajo anterior. Además, advirtió de la situación de los profesionales vinculados al turismo o el canal horeca. Todo ello, añadió, ha provocado que algunos hayan decidido abandonar la actividad y cerrar su empresa. 

También explicó que la existencia de una menor carga de trabajo se ha traducido en una bajada de los precios, aunque de momento los combustibles les han dado un respiro. Precisamente, expresó su temor de que el próximo año los cambios en la política energética del Gobiernos se traduzcan en subidas importantes, que advirtió serían “dramáticas”. “Estamos recuperándonos, pero la situación no es buena”, insistió.

Además, destacó la buena interlocución que mantienen con la Junta, que recordó habilitó locales para sus paradas durante el cierre de la hostelería de noviembre. Ahora abordan ayudas para el sector, así como para la incorporación de jóvenes, con subvenciones para la obtención de carnet de conducir.

Mercado interno e internacional

El transporte de mercancías dentro de la Comunidad experimentó un aumento del 11,25 por ciento hasta septiembre, en relación al mismo periodo del año anterior, con 23,88 millones de toneladas. De esta cantidad, la mayoría, 18,4 millones, correspondió a movimientos entre municipios y 5,3 a tráficos intramunicipales. En el primero, la subida fue del 4,45 mientras en el segundo hubo un despegue del 43,2 por ciento. Igualmente, en los últimos 12 meses, anotaron una rebaja del 13,4 por ciento.

Las operaciones con otras comunidades movieron un 9,58 por ciento más de mercancías, con 16,72 millones de toneladas, de las que 7,07 se recibieron y 9,65, se expidieron. Entre octubre de 2019 y septiembre de 2020, el avance fue del 3,79 por ciento.

Finalmente, el mercado internacional dejó un retroceso del 25,01 por ciento en el tercer trimestre del año, con un volumen de 897.000 millones de toneladas, de las que 384.000 se recibieron y 513.000 se expidieron.