Turismo celebrará el aniversario de la estatua del diablillo

DS
-

Será el jueves 23 de enero con una visita guiada gratuita y un "espectáculo sorpresa"

Turismo celebrará el aniversario de la estatua del diablillo

GALERÍA

Diablillo

El área de Turismo del Ayuntamiento de Segovia celebrará el próximo jueves el primer aniversario de la colocación de la estatua del diablillo, en la calle San Juan, con una visita guiada gratuita a partir de las 19.00 horas. El paseo empezará en el desarenador de San Gabriel y finalizará en la plaza de Avendaño, donde tendrá lugar "un espectáculo sorpresa" a partir de las 20.30.

Según informa el Ayuntamiento a través de un comunicado, quienes deseen hacer la visita tienen que inscribirse previamente en la Central de Reservas, en el Azoguejo, mientras que en la plaza de Avendaño no habrá aforo limitado.

"El Acueducto de Segovia, obra extraordinaria Patrimonio de la Humanidad, ha prestado servicio a la ciudad hasta fechas recientes y a través de los siglos, apenas ha sufrido modificaciones. Sus 167 arcos de piedra están construidos  por sillares unidos sin argamasa mediante un ingenioso equilibrio de fuerzas. Con sus 16.220 metros de longitud, 28’10 metros de altura, y casi 2000 años de vida, es posiblemente el Acueducto más espectacular y mejor conservado de todos los que hubo en el imperio romano, aunque la leyenda segoviana dice que su auténtico constructor fue el diablo", recuerda el Ayuntamiento en su comunicado. "Hoy, la escultura del diablillo del Acueducto recuerda esta hermosa leyenda, invitándonos a fotografiarnos con él y su obra inacabada, puesto que la leyenda cuenta que le faltó por colocar una piedra".

La polémica inicial por su colocación provocó un aluvión de titulares dentro y fuera de España que supusieron "una publicidad extraordinaria y sin precedentes para la ciudad". Y según Turismo, "hoy la figura del diablillo del Acueducto es inseparable del perfil de la ciudad y del recuerdo de numerosos viajeros que la visitan para fotografiarse junto a ella". 

La escultura pretende popularizar la leyenda que forma parte del patrimonio emocional de los segovianos y que es poco conocida entre los visitantes de la ciudad; pero además, la elección de su ubicación tenía un doble propósito: invitar a los turistas y visitantes a conocer otra parte de la ciudad menos transitada, como es el barrio de los Caballeros, y descongestionar el tránsito peatonal de la calle Real.

Turismo de Segovia ha reforzado esta iniciativa y desde el año pasado la visita Patrimonio de la Humanidad realiza parte de su recorrido por el barrio de los Caballeros, partiendo del Acueducto hacia la calle de San Juan y visitando el diablillo. Además, ha generado nuevos productos turísticos que inciden en promocionar la zona norte de la ciudad, como es la visita Del Diablillo a la Catedral.

La colocación de la escultura fue posible gracias a la donación de la escultura realizada por el artista José Antonio Abella, y a la firma de un convenio entre el Ayuntamiento y el empresario segoviano José Luis Herrero para costear la fundición y colocación.

La escultura fue concebida para formar parte de la ciudad como un detalle más que enriquezca su imagen, tal como ocurre en otras ciudades europeas como en Copenhague con la Sirenita, en Bruselas con el Manneken Pis y o en Lübeck con el simpático Teufel (demonio).

La escultura representa a un diablillo que, sentado sobre el muro de la calle San Juan, en la parte más alta de esta vía, usando unas tenazas sujeta el sillar de granito que completaría la obra.

En la escultura del "constructor del Acueducto", el diablo no se presenta como un protagonista siniestro, sino como un simpático personaje que resulta engañado por las circunstancias y el ingenio de los habitantes de la ciudad. Su representación escultórica se aleja de las visiones aterradoras de la iconografía medieval. Es un diablo sonriente y rechoncho, muy alejado de un siniestro demonio con el que asustar a los niños.

Además, Abella le añadió un elemento de actualidad, un teléfono móvil con el que el propio diablo se está haciendo una fotografía frente a su obra, el Acueducto. Una invitación sin palabras a que los turistas hagan lo mismo junto al diablillo y un guiño que permite al escultor, al visitante y al segoviano dejar constancia de su cariño hacia la ciudad de Segovia, ya que en la cara visible del teléfono móvil figura la inscripción “I love Segovia", con un corazón en lugar de 'love'.