Festivales con mascarilla

A.M.
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El Hay de la Literatura y las Artes y Titirimundi utilizarán espacios acotados, con escaso aforo y asientos preasignados a los que habrá que acceder para ocuparlos con suficiente tiempo de antelación

Festivales con mascarilla - Foto: Diego de Miguel

El Hay Festival, que inaugura su programa de artes visuales,  el 7 de septiembre,  fijando el grueso de actividades entre el 17 y el 20 de septiembre, garantiza la seguridad de los espectadores y participantes con la adopción de varias medidas, prácticamente similares a las que empleará días desspues, en la semana del 21, el Festival de Títeres Titirimundi.    

Sitios abiertos pero acotados, donde se pueda controlar el número de espectadores, que será muyt reducido, dispensadores de gel, uso de mascarilla y distancia de un metro y medio entre localidades, son algunos de los aspectos que contemplan las responsables de ambos eventos, quienes se han visto obligadas a modificar la programación prevista antes de marzo, principalmente porque hay invitados que no podrán viajar desde su país de origen, quedando básicamente en el programa los nacionales. 

Sheila Cremaschi, directora del Hay Festival Segovia, marca internacional que ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias, junto con la Feria del libro de Guadalajara (México), asegura que «asistir a los eventos va a ser muy seguro ya teníamos programado y organizado todo con las ultimas directrices que ha marcado ahora la Junta de Castilla yLeón». 

Convencida de que hay que apostar por la cultura en las horas bajas y, «aunque sea con pequeñas cosas,  ayudar a un muy lenta recuperación del sector», Cremaschi habla de que se tomará la temperatura a los espectadores, se reducirá el tiempo de las intervenciones, no habrá micrófonos para pasar entre el público y el 80% de las conversaciones sobre los escenarios será entre dos personas.  «Con las precauciones que estamos tomando la gente puede asistir con tranquilidad, las capacidades son ridículas, también están suspendidos los cócteles...», matiza.

La mayoría de los espacios al aire libre tienen 50 personas permitidas, los más grandes, como el Teatro Juan Bravo o el jardín de Los Zuloaga, se habilitarán para 90 localidades.  En ambos festivales, los horarios serán muy espaciados para evitar aglomeraciones y que los espectadores se puedan acomodar sin prisa. «Segovia es segura» es el mensaje que quiere trasladar Cremaschi.

cambios. Si Titirimundi daba prioridad a las compañías, ahora ha cambiado el chip para que prime la seguridad. En marzo deshicieron el programa, a punto de entrar en imprenta,  para irse adaptando a las nuevas reglas del juego, que van modificándose día a día, según su directora, Marian Palma. 

Se suspenden los espectáculos de calle, para pasar a otros lugares donde se pueda controlar el acceso sin que se pierda la identidad, como el jardín de Los Zuloaga, la Casa de la Moneda, la Casa de la Tierra, las ruinas de San Agustín o el Palacio de Quintanar (jardín y patio). Hablamos de espectáculos íntimos y compañías españolas que tratarán de llevar al público la esencia de este popular evento, sin perder calidad.

Marian Palma es partidaria de mantener toda actividad cultural con las medidas adecuadas a esta situación porque, en su opinión,  «la cultura debe permanecer y no se me ocurre una actividad social más segura como Titirimundi, utilizando todas las medidas que vamos a implantar».