El empresario flamenco que puso una pica en Segovia

A.M.
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La FES otorga su premio anual y el Cecale de Oro a Bart van Malderen, director ejecutivo de Drylock Technologies, que ha promovido una fábrica en Hontoria con una inversión de 60 millones y 160 empleos directos

El empresario flamenco que puso una pica en Segovia

Hombre de empresa, pragmático y de ideas claras, a sus 53 años,  el belga Bart van Malderen  ha dejado su huella en Segovia, donde ha puesto la pica, además de en flandes, su lugar de origen,  primero como impulsor de Ontex y, posteriormente, levantando la factoría Drylock Technologies, en el Polígono de Hontoria, la mayor inversión industrial de la provincia a lo largo de su historia.  Cerca de 60 millones de euros y más de 160 empleos directos se suman a las anteriores inversiones y puestos de trabajo que su familia había creado en la provincia, hace cerca de tres décadas, con 100 millones de facturación prevista este año.

Su esfuerzo e iniciativa en el negocio de la higiene íntima, siempre acompañado por su mano derecha en estas tierras, Miguel Ángel González,  ha sido premiado ahora por la Federación Empresarial Segoviana (FES) que le otorga su premio anual y, además, le posiciona para recibir el Cecale de Oro. 

Su padre, Paul van Malderen, fundó el gran grupo empresarial Ontex, en la década de los setenta del siglo pasado y, dos décadas después, llegó hasta Segovia a través de la adquisición de la antigua fábrica 'Fibras Sanitarias', un proyecto al que González se unió desde el inicio.  Se convirtió entonces en el mayor productor de pañales bajo la fórmula de marca distribuidor. Ya como presidente ejecutivo, después de que la empresa capital riesgo Candover adquiriera Ontex, Bart van Malderen inauguró, en 2006, la planta de Ontex en Valverde del Majano.

Reconoce que su experiencia de entonces le ha llevado a pensar en que Segovia es un territorio que recomendaría a cualquier empresario que quisiese invertir en España,  a donde volvió de nuevo después de constituir Drylock Technologies,  en 2012. Ha desarrollado el primer pañal de niño sin celulosa (‘magical tubes’), con patente propia, capaces de evitar fugas y garantizar la comodidad de los absorbentes. Hoy, la empresa de van Malderen cuenta en el mundo con nueve fábricas que dan empleo a 3.100 personas. El año pasado la compañía registró una facturación de 514 millones; todo un récord considerando que Drylock partía de cero en 2012. En 2021 prevé facturar 700 millones.

La clave del éxito de la compañía, según explica su director ejecutivo a EL DÍA es «conjugar la inversión en tecnología de última generación con la inversión en nuestros equipos humanos». 

Van Malderen afirma que el grupo de Drylock en Segovia «es magnífico, su futuro, incluso en una situación como la actual, pasa por seguir creciendo de una manera ordenada, incorporando nuevas herramientas de competitividad a nuestros procesos y, por supuesto, por el mantenimiento de nuestros estándares de calidad y precio en un mercado altamente competitivo".

La innovación, las nuevas materias primas cada vez más respetuosas con el medio ambiente, las reducciones de CO2 con análisis constantes en su logística y trabajar con sus propias patentes es lo que les permite seguir avanzando.  

Todo en un entorno en el que el mercado es cada día más exigente y sus respuestas se tienen que adelantar a las demandas de los clientes, como son productos cada vez más confortables, más finos y más cómodos y útiles, que sean capaces de incorporar nuevos elementos tecnológicos, como la capacidad de absorción en uso de un pañal de incontinencia.

Quien no se siente extranjero en Segovia,  después de veinticinco años, confiesa «que el trato desde las más altas representaciones de la Comunidad autónoma, a las más locales, siempre me ha permitido considerarme uno más; Segovia también la considero mi casa, conozco proyectos empresariales fuera de mi sector que merecen todo mi respeto y soy igualmente consciente del nivel de emprendimiento de la región; nosotros  desde Drylock simplemente añadimos un poco de nuestra experiencia a una zona geográfica de España que merece muchísimo la pena".

Una gran alegría y un gran honor le supone a este empresario ser el primer extranjero en recibir el galardón de la FES:  «Estoy absolutamente seguro de que existen muchos proyectos en la provincia que se merecerían este premio; por eso aprovechando esta oportunidad me gustaría compartirlo con todas las personas que en su día a día mantienen la ilusión por ser mejores y desde luego a todos nuestros colaboradores».