En declaraciones a EFE, el biólogo de SEO/BirdLife Juan Carlos del Moral ha explicado que este martes han comenzado a tener imágenes más detalladas de la zona del incendio de La Granja, que por el momento el fuego ha arrasado desde el pasado domingo unas 300 hectáreas, más de la mitad de ellas en el Parque Nacional de Guadarrama.

Los ejemplares de buitres negros están localizados fundamentalmente en el Pinar de Valsaín, en la Sierra de Guadarrama, y las llamas se han quedado a la izquierda de esta zona, aunque desde SEO/BirdLife no descartan que el fuego haya podido “dañar algún nido”.

“Se ha quedado a algo más de un kilómetro de cuando empieza a haber más nidos y a tres o cuatro kilómetros del núcleo de la población de estas aves”, ha afirmado el biólogo.

Más de 150 parejas de buitres negros

En la zona viven 156 parejas de buitres negros, que anidan también en los municipios de Navafría (Segovia) y Navacerrada (Madrid), aunque esta aves son “muy esquivas” y con los primeros movimientos de humo abandonaron sus nidos para ocupar otros espacios, según la organización ecologista.

Del Moral ha recordado que los buitres negros miden tres metros de envergadura y en esta época del año los pollos cuentan con entre 60 y 70 días y son incapaces de volar hasta el mes de septiembre.

“La humareda y el trajín de los hidroaviones habrán provocado que los mayores hayan abandonado los nidos, pero los polluelos pueden aguantar hasta que vuelvan para comer”, ha asegurado.

La organización ecologista esperará hasta que el fuego sea extinguido para acercarse a la zona y evaluar de primera mano su estado.

Restaurar la zona “lo antes posible”

No obstante, el principal objetivo será “restaurar” la zona lo “antes posible”, aunque del Moral ha advertido de que las aves viven en árboles que tienen más de 40 años y se tardará en repoblar la zona.

En la zona afectada también viven otras dos especies que han podido verse afectadas por las llamas: el águila calzada y los halcones abejeros.

“El resto de aves se habrán ido de la zona a tiempo”, cree el biólogo, que ha destacado que hay especies protegidas de mariposas que también estaban en el lugar afectado por el incendio.

El buitre negro es una especie en peligro de extinción y supone el primer emblema del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, donde habita una colonia de unas 300 parejas de buitres negros.

Una especie amenazada

Se trata de “la cuarta colonia más importante de España”, por detrás de la de Monfragüe, la de Sierra de Sampedro y la de Cabañeros, ha señalado del Moral, quien ha apuntado que además, la de la Sierra de Guadarrama “destaca porque constituye el límite norte de distribución de esta especie en la Península”.

En España hay 2.600 parejas de buitres negros, lo que supone el 93 % de la población europea de esta especie, que está amenazada principalmente por los venenos que se vierten en los entornos naturales, por las élices de los aerogeneradores y los tendidos eléctricos.

Hace décadas estas aves “también estaban perseguidas y eran tiroteadas” porque a veces se confundían con animales depredadores, ha contado del Moral, quien ha destacado que esa “mala fama está injustificada” porque son “aves carroñeras imprescindibles para nuestro ecosistema ya que limpian de cadáveres la naturaleza”. EFEverde