Jornadas gastronómicas de la cocina gallega en el Parador

DS
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La sexta edición de esta cita gastronómica cuenta con el apoyo y la experiencia del Parador de Baiona, cuyo chef ha colaborado en el diseño de la carta.

Jornadas gastronómicas de la cocina gallega en el Parador

No solo del crujiente e icónico cochinillo asado vive el segoviano. En la capital castellana se saben apreciar las excelencias de los fogones de otras latitudes y fruto de esa inquietud culinaria el Parador de Segovia presenta una nueva edición de sus “Xornadas de la Boa Cociña Galega”. Una cita gastronómica en la que ofrece en la recta final del invierno los mejores productos de la cocina de Galicia en las mesas de su establecimiento. Las jornadas gastronómicas, que este año alcanzan ya su sexta edición, arrancan el 21 de febrero y se van a prolongar hasta el 7 de marzo en servicios de almuerzos y cenas. El Parador de Segovia, según explica su director, Alberto Zerbini, ha aprovechado las sinergias que genera la cadena hotelera pública para desarrollar esta exitosa iniciativa con el apoyo y asesoramiento del experimentado Parador de Baiona. Directo desde las lonjas atlánticas.

El chef del restaurante segoviano, Sergio Muñoz, ha diseñado junto al también jefe de Cocina del Parador de Baiona, Miguel Muñoz, - quien además va a estar presente en la presentación - una completa carta para disfrutar de una amplia representación de los sabores auténticos del noroeste español. Una cocina de tradición celta caracterizada sobre todo por la alta calidad de las materias primas y por la sencillez de las elaboraciones que potencian su intensidad natural. Las jornadas van a permitir disfrutar a unos precios asequibles de productos únicos de calidad y origen garantizados, llegados directamente desde las lonjas pontevedresas y servidos por los mismos proveedores que surten al Parador baionés. Pescados y mariscos con un sabor único como el que producen las aguas bravas del Atlántico y las características ambientales de sus prolíficas rías, sin olvidar las sabrosas carnes rojas del interior gallego y unos postres acreditados que suponen un cierre magnífico a un menú de claro sabor galaico.

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Así, dentro de los platos de “la cocina de siempre”, los comensales pueden degustar este año sugerencias como fritura de manitas de bogavante en cartucho, croquetas de cacheira (careta de cerdo adobada), zamburiñas asadas en su jugo y aceite verde, tarteira de mejillones de batea al vapor de albariño, almejas guisadas a la gallega con pimentón, pulpo a feira con cachelos, berberechos al albariño, navajas de la ría a la plancha o la empanada tradicional de pulpo marca de la casa. En la oferta de platos fuertes destaca el lomo de lubina gallega a la costra de sal, la suculenta caldeirada de pescados y moluscos, el lomo de buey gallego asado y el exquisito arroz guisado con choco en su tinta. Las clásicas filloas, en este caso rellenas de crema de orujo, no podían faltar dentro de la propuesta de larpeiradas (dulces) tradicionales, donde comparten espacio junto a la singular tarta de Santiago, que se acompaña de helado de vainilla, y las cañitas rellenas de crema de castaña. Cita gastronómica obligada entre los amantes de la buena cocina, Las jornadas gastronómicas, que permiten disfrutar a casi 600 kilómetros de distancia de la esencia del Restaurante Enxebre “A Pinta” -la propuesta de restauración más informal del Parador de Baionasustituyendo los atardeceres con las islas Cíes de fondo por inigualables panorámicas de la ciudad del acueducto, despierta un gran interés entre los segovianos. Se han convertido en una cita obligada entre los amantes de la buena mesa, que repiten año a año cuanto llegan estas fechas. Una alta demanda ante la que, Alberto Zerbini, recomienda reservar para garantizarse mesa en la fecha deseada. Y si la convocatoria supone una oportunidad excepcional para los segovianos de trasladarse hasta tierras gallegas a través del paladar, para los foráneos también constituye un buen motivo de cara a planificar una escapada a la ciudad del acueducto.