Nuevo cambio de planes con la gestión del alumbrado público de Segovia. El Ayuntamiento de la capital seguirá llevando a cabo su mantenimiento con recursos propios en lugar de privatizarlo, a pesar de que el mandato pasado lo acabó con la documentación (pliego de prescripciones técnicas y demás) lista para lanzar el concurso. Una licitación que se iba a producir más de cuatro años después de que presentara un plan director de alumbrado que, en la práctica, pasó todo ese tiempo a la sombra, con sólo reposiciones por averías. El retraso vino motivado en buena medida porque la privatización, en realidad, era a su vez una alternativa improvisada al ver frustrada la idea inicial, que pasaba por una encomienda de gestión al Somacyl (Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León) que se topó con un cambio normativo a nivel europeo por el que se prohibió ese tipo de fórmulas. Una larga demora amplificada por el hecho de que ya a finales de 2014 se organizara incluso una exposición en La Alhóndiga donde ya se mostraba cómo sería la nueva iluminación. Aquello no pasó de los paneles y así quedó el plan en pañales.

Ahora, con la maduración del cambio del cambio, la primera ventaja que se valora es la económica, ya que resultará más barato seguir tirando de operarios municipales para labores de reposición que pagar un canon de casi 400.000 euros al año a una empresa, que es lo que se estaba estimando que costaría. Y el primer inconveniente, que la renovación será más lenta, dado que con la privatización se preveía renovar todas las farolas convencionales en el primer año de concesión; y en sólo tres la iluminación monumental, la que ya hay y la que se sumaría con otros proyectos lumínicos de nueva creación hasta alcanzar una treintena de espacios patrimoniales. En 2021, eso sí, se cuenta con invertir como mínimo 500.000 euros procedentes de los 6,2 millones de inversión extraordinaria planificada con cargo a los remanentes de otros ejercicios acumulados desde 2012, retenidos hasta ahora por la ‘ley Montoro’ de estabilidad presupuestaria y liberados como excepción por el Estado para paliar la crisis económica desatada por la pandemia.

Por otro lado, en términos políticos chocaba que se optara por privatizar el mantenimiento del alumbrado cuando la estrategia de este mandato en la gestión de servicios va justo en el sentido contrario, a instancias de los pactos del PSOE con sus socios de gobierno (IU) y programa (Podemos-Equo), que demandan el estudio de la remunicipalización de la ORA y otras áreas. Aunque Miguel Merino, que entró nuevo este mandato para suceder a Paloma Maroto al frente de la Concejalía de Obras, Infraestructuras y Servicios, destaca el ahorro de costes entre los argumentos que avalan el cambio de planes.

LAS RAZONES DEL CAMBIO. «El plan de renovación de alumbrado se mantiene y las renovaciones que vayamos haciendo se llevarán a cabo con esa referencia, lo iremos cumpliendo poco a poco a la vez que intentamos captar ayuda externa para ir más rápido», explica Merino. «Y aparte del ahorro de costes, el pliego que se redactó en su momento se había quedado totalmente obsoleto por todo lo que ha evolucionado la tecnología de iluminación», añade. Asimismo, en su opinión, el «mecanismo de gestión» por el que se pensaba optar «ya no es algo que se haga actualmente». «Uno no concede este tipo de cambios por periodos de 18 años (era el tiempo de contrata que se preveía) y pagando un canon de mantenimiento tan alto». 

Por tanto, según resume, «al final se trata de mejorar sustancialmente el alumbrado en los próximos años, pero siendo más eficientes con el gasto». De hecho, «si todos los años pudiéramos dedicar casi 400.000 euros a renovar el alumbrado, que es lo que podía suponer ese canon, en pocos años cambiaríamos todas las luces». Por de pronto, aparte de que en 2021 se superará esa inversión, entre agosto y octubre de este año ya se abordó el cambio a led de las luces de la Plaza Mayor mediante la adjudicación de dos contratos por casi 70.000 euros en total. Y casi 50.000 más se destinaron a costear la instalación de 13 puntos de luz en el vial del AVE, en este caso con placas solares para no tener que tirar de la red convencional, salvo que pasen más de tres días sin sol suficiente para ello. También se renovó la iluminación del parque del Reloj, en Nueva Segovia, y las inversiones seguirán el próximo año por otras zonas que ya se están definiendo para ir sacando a licitación las contrataciones a partir de enero, según el concejal de Obras. Porque las nuevas instalaciones correrán a cargo de empresas privadas, como siempre, pero el mantenimiento, ahora ya sin duda, seguirá siendo labor de los operarios municipales.