Tras el tradicional milagro del paso de la Hoja del Libro de la Vida, concentrándose el pueblo de Segovia ante la imagen del Santo Patrón en la portada principal de la Catedral, anoche, la Catedral se ha llenado de segovianos para escuchar a las el tradicional villancico, obra barroca compuesta por Antonio Hidalgo en 1874, que cuenta anualmente con un joven solista y con las decenas de voces que forman el coro popular y que se sitúan en el Trascoro, además de contar con la presencia de las autoridades civiles y religiosas. A continuación, en la Capilla Mayor, se ha celebrado la misa en honor al santo presidida por el obispo,  César Franco, que desde el trascorro ha desfilado hasta el altar mayor junto a los cabildos de Segovia y Ávila, seguidos de la corporación municipal bajo mazas, presidida por la alcaldesa Clara Luquero.

El “Villancico a San Frutos”, que en este año 2019 se lleva cantando 145 años, es como una cantata en miniatura, pero ya de los tiempos románticos, con su música ágil y alegre que cautiva a todo el que lo escucha por primera vez y busca la manera de volverlo a escuchar de nuevo. Cerca de 200 voces y 40 músicos cantan al “Siervo bueno y fiel” y le bendicen y alaban. 

Dentro de los actos festivos organizados por el Ayuntamiento,  la mañana ha comenzado con una exposición de setas a cargo de la Sociedad Micológica de Segovia, y una exposición de aves de la Asociación Ornitológica de Segovia. Tras el villancico, la Cofradía del Paso de la Hoja ha nombrado Amigo de San Frutos 2019 al periodista y director de cine Miguel Velasco. Ha leído el Romance de San Frutos el fotógrafo y periodista Juan Martín Chas. La Banda de la Unión Musical Segoviana, dirigida por Francisco Cabanillas, ha cerrado con el Himno a Segovia.