El presidente de la Junta de Castilla y León, el popular Alfonso Fernández Mañueco, descartó ayer que esté barajando adelantar las elecciones autonómicas en la Comunidad, tras las diferencias surgidas en el Ejecutivo de coalición sobre la retirada del denominado plan de reestructuración de la Atención Primaria. «En mi cabeza no está esa idea», sentenció.

«Mi compromiso es con la gente de Castilla y León y con acabar el mandato siempre que haya estabilidad política y parlamentaria y no hay nada más que hablar de este asunto», zanjó Fernández Mañueco, que este viernes visitó la localidad de Navarredondilla (Ávila) para presentar el plan de restauración de la zona afectada por el incendio de la Sierra de la Paramera.

Asimismo, el presidente de la Junta defendió que su sintonía con el vicepresidente y portavoz, Francisco Igea, «sigue siendo igual que el primer día», después de que la tensión se elevara entre los dos socios del Gobierno de coalición en relación a la postura sobre una iniciativa del Grupo Socialista centrada en las políticas sobre la Atención Primaria, según informa Ical.

Mañueco además recibió ayer el respaldo de la dirección nacional, aunque desde Génova no quisieron entrar en muchos detalles. El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Montesinos, aseguró, ante la posibilidad de que se adelanten las elecciones autonómicas en Castilla y León o en Andalucía, que es una decisión que compete a los presidentes autonómicos, pero subrayó que ambos han dicho «claramente que lo que quieren es seguir trabajando contra la crisis económica y sanitaria». Eso sí, reconoció que se trata de «casos distintos».

«La dirección nacional del PP y Pablo Casado apoyan al presidente de Castilla y León, que ya ha dicho claramente que lo que quiere es seguir trabajando contra la crisis económica y sanitaria», insistió.

Al ser preguntado Montesinos, que ofreció una rueda de prensa en el Congreso, expresamente si Génova avalaría una convocatoria adelantada de elecciones en Castilla y León y en Andalucía, en el primer caso por el choque con Cs por la atención primaria, y en el segundo por la ausencia de Presupuestos que pueden no prosperar, reiteró que se trata de «casos distintos».

El responsable de Comunicación del PP, ante la insistencia de los periodistas sobre si la dirección nacional no descarta entonces el escenario de un posible adelanto electoral en Castilla y León, señaló que «la decisión es del presidente. Y nosotros como dirección nacional siempre vamos a estar al lado del presidente de Castilla y León que ya ha dicho que su interés es seguir trabajando en la defensa de los intereses de los ciudadanos en la lucha contra la crisis económica y sanitaria», manifestó textualmente según informa Europa Press.

crisis política. La decisión que ha abierto esta grieta entre las dos formaciones que participan en el Gobierno de coalición surgió el pasado lunes cuando el presidente de la Junta anunció durante una pregunta parlamentaria formulada por el líder de la oposición, Luis Tudanca, que apoyaría la proposición no de ley que pedía la retirada del plan de reestructuración de la Atención Primaria y que se garantizara la asistencia presencial en el medio rural, a través de los consultorios locales.

Esto llevó al vicepresidente a manifestar, también en sede parlamentaria, que la política sanitaria que se hacía en España era una «puñetera vergüenza» y supuso que al día siguiente, el martes, PP y Cs no votaran de forma conjunta la iniciativa, que fue respaldada por todos los grupos de la Cámara con excepción de los 11 procuradores naranjas, que se abstuvieron.

Igea calificó en un primer momento de «error estratégico» la decisión de Fernández Mañueco y respaldó a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, y su continuidad en el Ejecutivo, cuya reunión del Consejo de Gobierno el pasado jueves sirvió, según relató el vicepresidente y portavoz, para reconducir las relaciones y dar por resuelta la «discrepancia» surgida, tras aceptar el encargo de reunirse con el socialista Luis Tudanca para consensuar la reordenación de la sanidad rural.