De la emoción a la sorpresa. El equipo de Daniel Gordo regresaba a la pista en la que ascendió a Asobal -y antes a División dd Honor Plata-, pero se llevó un duro correctivo ante un rival que ya le venció en aquella tarde histórica en O Rosal.
Esta vez le pasó por encima, sobre todo en unos primeros veinte minutos en los que le endosó un parcial de 10-3 del que ya nunca se recuperó. En ningún momento tuvo opciones de remontar el partido -la desventaja llegó a alcanzar los diez goles (19-9, minuto 40) y empanó su sobresaliente comienzo de temporada en Liga.