'Yo no mato ni una mosca'

L.H.M
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M.S.S hoy se ha sentado en el banquillo para responder ante las acusaciones que le señalan como responsable de proponer a F.J.S.C matar a un vecino de Cantalejo y a su familia a cambio de 50.000 euros.

'Yo no mato ni una mosca' - Foto: Imagen: Olga Rubio

M.S.S. , vecino de Cuéllar y de avanzada edad, ha respondido hay a las preguntas del ministerio Fiscal, los letrados y los magistrados en la causa que le señala como principal acusado de planificar la muerte de un vecino de Cantalejo y de su familia, con el que arrastra problemas desde 2008 tras un negocio inmobiliario en Rumanía y al que acusa de robarle 1,8 millones de euros.  M.S.S. se ha mostrado rotundo al negar la acusación, y textualmente decía 'yo no mato ni una mosca, y menos mando matar'. 

De esta forma ha negado los hechos denunciados por la persona con la que supuestamente acordó que le pagaría 50.000 euros si éste torturaba y asesinaba a al empresario y su familia, el por entoncés regente (en 2016) de un bar de Cuéllar, F.J.S.C.

Un plan que nunca llegó a materializarse porque el supuesto encargado de estas muertes, tal y como ha reconocido hoy ante la Justicia en su testimonio por videoconferencia fue consciente de la gravedad de la situación y denunció los hechos ante la policía. Eso sí, antes ya había cobrado más de 30.000 euros de la cuantía pactada. F.J.S.C ha asegurado que el acusado le pidió que asesinase a esta persona y a su familia e incluso le llevó a la zona donde vivían y le enseñó fotografías de ellos. Asustado de constatar que no cedería en este empeño, agregaba en su declaración, decidió marcharse de Segovia y denunciar lo sucedido porque 'sé que iba a buscar un loco que lo hiciera', en este sentido añadía 'tenía miedo, opté por darle largas e irme'.

En el juicio, celebrado en la audiencia Provincial de Segovia, también ha declarado el empresario víctima de este plan y su mujer. Ambos han reconocido estar viviendo 'una película de terror'. 'Estamos muertos de miedo', añadía el principal objetivo de este supuesto plan, porque 'me ha dicho en varias ocasiones que mi vida vale dos pesetas'.

La Fiscalía pide siete años de prisión para el acusado por proposición de asesinato en grado de tentativa. Mientras, la acusación particular incrementa esta petición hasta los 40, 10 por cada una de las víctimas de este plan.