Como consecuencia de las medidas sanitarias provocadas por la pandemia del COVID-19, este año el acto no se ha realizado en el Patio de Armas del Alcázar de Segovia; se ha realizado en la Academia de Artillería en un acto académico interno pero igualmente cargado de emoción y tradición.

Este año cursarán sus estudios en el Centro 38 alféreces alumnos de 5º curso, pertenecientes a la 309 promoción de la escala de oficiales de Artillería (LXXVI de la Academia General Militar) y 86 sargentos alumnos de 3º curso y 82 caballeros y damas alumnos de 2º curso, pertenecientes a las XLVI y XLVII promociones de la Escala de Suboficiales, respectivamente.
Del mismo modo que el 16 de mayo de 1764, el padre Eximeno, primer jefe de estudios del Real Colegio de Artillería, pronunció la lección inaugural en la ceremonia de apertura del Real Colegio de Artillería, este año el teniente coronel Francisco José Martín Moya, subdirector–jefe de Estudios de la Academia, impartió la primera lección del curso.

Dirigiéndose a los alféreces, sargentos y damas y caballeros alumnos,  Martín Moya ha dicho que "no piensen que aquí finalizará su formación. Esta deberá ser continua a lo largo de toda su carrera militar y tendrán que basarla en su capacidad para estudiar e investigar como hicieron nuestros predecesores en esta cuna del Arma. Esto les permitirá adaptar su actuación a los avances tecnológicos e integrar los procedimientos operativos de sus futuras unidades con los de otros Ejércitos y con nuestros aliados".